Como casi todas las semanas desde el mes de marzo, los pantanos de la cabecera del Tajo siguen perdiendo volumen de embalse. Una sangría que no parece terminar nunca y que ha dejado las reservas a primera hora del lunes 20 de noviembre en 231,89 hectómetros cúbicos tras perder 2,06 hectómetros en los últimos siete días.

De este modo, el agua embalsada se queda en el 9,37 por 100 de los 2.474 hectómetros que son capaces de retener Entrepeñas y Buendía, tal y como ha comprobado encastillalamancha.es en el portal online de información hidrológica de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT).

Y es que en la cabecera del Tajo sigue esperando las lluvias aunque sigue sin hacer presión de que lleguen, por lo que se avecina un futuro incierto en esta ola de sequía que no solo afecta a estos dos embalses. El conjunto de agua almacenada en Castilla-La Mancha no llega al 18 por 100, y cuenta con 1.033 hectómetros cúbicos de los más de 5.750 que tienen como capacidad el conjunto de embalses de la región.

Buendía pierde 0,89 hectómetros

Una semana más, Buendía pierde volumen de embalse. Han sido exactamente 0.89 hectómetros cúbicos, que han llevado las reservas desde los 157,16 hectómetros de la semana pasada a los 156,27 con los que cuenta el lunes 20. El porcentaje se queda en el 9,46 de los 1.651 hectómetros que puede almacenar.

Más de un hectómetro cedido en Entrepeñas

Por su parte, el agua en Entrepeñas también ha descendido. Son 1,17 hectómetros menos hasta dejar 156,27 hectómetros. En este momento contiene el 9,42 por 100 de los 802 hectómetros que tiene de capacidad.

En el límite de los 400 hace 365 días

Los pantanos de la cabecera del Tajo, a estas alturas del 2016, estaban en cuesta arriba porque aunque poco, en el otoño del año pasado las lluvias aparecieron antes. Entre los dos embalses albergaban 408,23 hectómetros, el 16,5 por 100, que divididos entre embalses eran 246,56 hectómetros para Buendía, y 161,67 hectómetros en Entrepeñas.