sábado, 27 de julio de 2024
29/11/2012junio 13th, 2017

La Plataforma contra el Cementerio Nuclear en Cuenca confía en que los recursos que han presentado prosperen ante el Tribunal Supremo y supongan la paralización definitiva de la construcción del Almacén Temporal Centralizado de Residuos Nucleares (ATC) en la localidad conquense de Villar de Cañas.

El Tribunal Supremo ha rechazado la suspensión cautelar del proyecto del ATC en Villar de Cañas tras la petición hecha por los ayuntamientos de Yebra (Guadalajara) y Ascó (Tarragona), que optaban a albergar el almacén nuclear.


La portavoz de la Plataforma contra el Cementerio Nuclear de Cuenca, María Andrés, ha reconocido a Efe que les hubiera gustado la paralización cautelar, pero, que lo que en verdad persiguen es una paralización definitiva y que el ATC no se construya.

Andrés ha señalado que de momento no tienen noticias del Supremo sobre los otros tres recursos presentados, por un lado, los de Greenpeace y Ecologistas en Acción, centrados en exigir la realización del informe de impacto ambiental preceptivo que este proyecto aún no tiene.

El otro lo ha presentado un grupo de ayuntamientos de la comarca de Villar de Cañas, que pone de relieve la falta de consenso social en la zona, además de afirmar que hubo fallos en el desarrollo del pleno que presentó la candidatura para acoger el almacén.

Andrés considera que la lentitud de los plazos de construcción y las demoras que está sufriendo el arranque de las obras pueden favorecer los intereses de la Plataforma a la hora de que la Justicia paralice el proceso de construcción.

En este sentido, ha insistido en que cuando quiera estar construido, el ATC será una infraestructura totalmente inútil, ya que el retraso en su construcción obligará a tener ya almacenados los residuos nucleares en otros lugares.

Pese a que esta semana el presidente de Enresa, Francisco Gil-Ortega, aseguró ante el Congreso que el ATC estará terminado en 2017, la plataforma calcula que las obras finalizarán como muy pronto a principios de 2021.

«La demora en los plazos es un aliento para nosotros; la directiva europea impide que haya residuos en las piscinas de las centrales nucleares si están llenas, y por tanto si se van cumpliendo los plazos tendrán que tener una solución para el almacenamiento de residuos cuando el ATC aún no esté construido», ha dicho Andrés.

También ha tachado de «vergonzoso» el baile de plazos que están realizando los responsables de Enresa y de la Sepi en los últimos meses, «en contra de lo que dicen los propios técnicos de Enresa, que calculan cinco años para la construcción del cementerio».

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