Cada vez son más los turistas que se alojan en viviendas y apartamentos turísticos en lugar de reservar habitación en un hotel. Esta tendencia junto con la decisión de ceder a las comunidades autónomas competencia para regular el alquiler de este tipo alojamiento, han provocado una situación de tensión entre hosteleros y propietarios de viviendas para uso vacacional. Ambos urgen a las administraciones una regulación común para evitar la competencia desleal y el fraude fiscal.
El pasado mes de julio se presentó el I Estudio sobre el impacto Económico y Social de las Viviendas de Uso Turístico en España, elaborado por Esade y Fevitur (Federación Española de Viviendas Turísticas). El estudio reflejaba que el 14 por 100 de los turistas que visitaron España en 2013 se alojaron en una vivienda vacacional siendo este el alojamiento preferido por las familias extranjeras.
Para Fevitur, las viviendas turísticas constituyen un impulso a la para la economía local ya que quienes se alojan en ellas suelen realizar sus compras en los pequeños comercios de la zona y utilizar el transporte urbano.
Sin embargo, los dueños de establecimientos hoteleros denuncian competencia desleal ya que el alquiler de los apartamentos y viviendas no está reglado en todas las Comunidades Autónomas y tampoco existe consenso a nivel nacional sobre las condiciones que deben cumplir propietarios, viviendas e inquilinos para que esta modalidad no perjudique al resto de alojamientos.
DESREGULACIÓN Y LAGUNA NORMATIVA
Desde el año 2013 el ejecutivo decidió cambiar la legislación que regulaba el alquiler de viviendas para uso vacacional. Así, con la ley de Arrendamiento Urbano, se daba vía libre a las Comunidades Autónomas para regular el uso de este tipo de alquiler.
Hasta el momento solo ocho comunidades autónomas (Asturias, Navarra, Cataluña, Aragón, Madrid, Valencia, las Islas Baleares, y las Islas Canarias) han regulado las viviendas y apartamentos de vacaciones. En Castilla-La Mancha la Ley de Ordenación Turística reconoce su existencia y clasifica estas viviendas como «alojamiento extrahotelero», pero no establece ningún mecanismo para solicitar licencias ni regular las condiciones del alquiler.
Esta laguna legislativa resulta perjudicial para el sector hostelero de la región, que ve en los apartamentos y viviendas turísticas una amenaza para sus establecimientos. Además, la desregulación sitúa a propietarios e inquilinos ante una carencia de derechos y deberes complicando también la tarea de exigir responsabilidad legal y económica por los posibles incidentes que puedan ocurrir.
LOS PROPIETARIOS DE VIVIENDAS TURÍSTICAS URGEN UNA NORMATIVA COMÚN
Para defender los intereses de los propietarios surgió la Federación Española de Viviendas Turísticas (Fevitur) que agrupa a 12 asociaciones regionales. El pasado mes de julio, después de que la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) elaborara un manifiesto solicitando a las administraciones competentes que tomaran medidas en contra de los alojamientos ilegales, la Federación volvió a insistir en una regulación homogénea para su actividad.
Fevitur argumenta en un manifiesto que, ante el crecimiento del sector, establecer una normativa común es la mejor manera para competir en justas condiciones con los alojamientos hoteleros y evitar el fraude fiscal: «Queremos normativas nuevas que nos permitan trabajar con la seguridad jurídica necesaria para poder desarrollar nuestra actividad adecuadamente, atraer inversión y generar empleo».
RESPONSABILIDAD EN LA WEB
Portales como Homeaway actúan como punto de encuentro entre propietarios y viajeros. Esta plataforma establece que la responsabilidad de los contenidos publicados en la web recae sobre los propios anunciantes. Sin embargo, no exigen al propietario documentación para verificar el estado de «legalidad» de la vivienda registrada.
Vacaciones-España.es, por su parte, aconseja a los propietarios adjuntar todas las grantías posibles que prueben el estado de legalidad de la vivienda turística antes de colgar el anuncio para buscar inquilinos. Pero al igual que en el caso anterior, esta web tampoco se responsabiliza por los fraudes que puedan tener lugar entre anunciantes y viajeros.
La plataforma Alterkeys constituye una excepción. Esta web decidió apoyar la regulación del sector borrando todas las propiedades registradas en Cataluña que no cumplían con los requisitos dictados por la Generalitat. En Valencia el gobierno autonómico optó por multar a las webs que permitan el registro de propiedades no declaradas para un uso vacacional.
INQUIETUD ENTRE LOS HOSTELEROS TOLEDANOS
En Castilla-La Mancha la ley establece que «son empresas de alojamiento turístico aquellas que se dedican, de manera profesional y habitual, a proporcionar hospedaje o residencia, mediante precio, a las personas que lo demandan, con o sin prestación de otros servicios». Más allá de este artículo, la Asociación de Hosteleros de Toledo pidió el pasado mes de marzo, a la entonces directora general de Turismo de la región Ángela Moreno, una normativa y una campaña para detectar infracciones en las páginas web que ofertan viviendas turísticas.
La concejala de Turismo en el ayuntamiento de Toledo, Rosana Rodríguez, señala que «los hosteleros nos han transmitido cierta inquietud por este asunto». Explica que desde el ayuntamiento «no estamos en contra de los apartamentos turísticos siempre que se cumplan con todos los requisitos legales».
Una hostelera toledana afirma que estos apartamentos están ejerciendo una «competencia desleal». Según explica, se trata de negocios que «no tributan por su actividad, a los propietarios no se les exige ciertos requisitos (por ejemplo seguridad de las instalaciones, control de viajeros, etc.) que sí se nos pide a los dueños de los hoteles y hostales; es imposible exigir responsabilidades tanto al propietario como a los inquilinos y los clientes no cuentan con protección».
Para el Hotel San Juan de los Reyes, la situación no se ha notado tanto en el negocio: «Está un poco más flojo que el año pasado, pero julio ha sido bueno y agosto está yendo muy bien, el hotel está lleno.» La encargada del restauante del hotel añade: «Muchos clientes reservan media pensión, también hay muchos desayunos. La gente no viene a Toledo para periodos largos. ¿Cómo va a meterse en un apartamento y tener que cocinar, hacer la compra…?»
Este medio ha intentado contactar con Federación Española de Viviendas Turísticas (Fevitur) y con la Asociación de Hosteleros de Toledo (AHT) sin que por el momento haya obtenido ninguna respuesta.