La Audiencia Provincial de Toledo ha resuelto desestimar el incidente de nulidad de actuaciones planteado por el abogado de Susana Guerrero, la madre que se niega a entregar a su hija de 10 años al padre de ésta, condenado por malos tratos e investigado por presuntos abusos a la menor, aunque tendrá que resolver sobre la custodia de la niña.
Este incidente de nulidad planteado provocó la suspensión del señalamiento de apelación civil que estaba previsto estudiarse en la Audiencia Provincial contra una sentencia de un juzgado de Talavera de la Reina que había modificado unas medidas familiares, basándose en el incumplimiento del régimen de visitas.
Una vez que se ha desestimado el incidente de nulidad a través de un auto, la Audiencia de Toledo tendrá que señalar de nuevo deliberación, voto y fallo de esta apelación civil contra la sentencia inicial para resolverla.
Guerrero ha asegurado a Efe, tras conocer el auto, que se encuentra «inmersa en una persecución judicial» y que la hoja de ruta de estos partidos judiciales «está trazada».
«Me están maltratando y se están riendo de mí y de mi hija», ha afirmado esta madre talaverana, quien ha agregado que su abogado ha presentado un escrito de subsanación «para que nos aclaren el auto que emiten».
La desestimación del incidente de nulidad por parte de la Audiencia Provincial de Toledo se ha conocido después de que Susana se sentara el pasado lunes en el banquillo de los acusados por un delito de denuncia falsa contra la actual pareja del padre de la niña, un juicio que ha tachado de «injusto».
«La sociedad está conmigo, pero todo apunta a que voy a salir condenada», ha señalado Guerrero, según la cual, «pretenden que acumule condenas para silenciarme y meterme entre rejas», ya que «desde la cárcel no podré demostrar que me encuentro ante un caso de presunta corrupción y presunta estafa hacia mi persona».
Ha precisado que la vía que le queda es esperar a que dicten sentencia y «se lleven a mi niña» y ha puntualizado: «ya no es mi temor, que estoy aterrorizada, sino el de mi hija, a la que quieren llevar con su agresor, su verdugo, su presunto abusador y mi abusador y maltratador», ha concluido.