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jueves, 28 de marzo de 2024
La agresión homófoba se produjo en el botellón que se desarrollaba cerca del cementerio de la localidad de Velada.
La agresión homófoba se produjo en el botellón que se desarrollaba cerca del cementerio de la localidad de Velada. Foto: Google Maps.
La Guardia Civil está investigando los hechos - 06 septiembre 2021 - Toledo

Un joven de 25 años ha denunciado una agresión homófoba que habría ocurrido en un botellón durante las fiestas de la localidad toledana de Velada. Recibió un puñetazo que lo tumbó en el suelo después de haber escuchado como le decían que «pierde aceite» y «maricón«.

Los hechos que ocurrieron el sábado por la noche en el botellón que se desarrollaba cerca del cementerio de la localidad ya han sido denunciados ante la Guardia Civil en el Puesto de Talavera. Según confirman a encastillalamancha.es fuentes de la Benemérita, en estos momento se está investigando este caso para esclarecer los hechos y realizando gestiones para la identificación de los autores. Además, los agentes también están investigando si se trata de un posible delito de odio.


El joven agredido se llama Miguel Ángel y ha sido víctima de la intolerancia de quienes no respetan la libertad de los demás. Según narra su amigo Pedro Gómez en el hilo de Twitter donde cuenta la historia, su grupo se encontraba saliendo de la aglomeración que se había producido en el botellón, cuando notaron que algunos de los amigos no avanzaban.

Una chica comenzó a insultar y después Miguel Ángel recibió un puñetazo

Una chica le había dicho a Miguel Ángel que «iba perdiendo aceite» y «no me roces, ah no, ya sé que no te gusta hacerlo porque eres maricón».

Miguel Ángel intentó proseguir su camino a pesar de los insultos, pero de pronto un puñetazo lo tiró al suelo.

Una amiga de la víctima intentó defenderlo diciendo que no le llamara «maricón» pero solo consiguió que la «chica homófoba», tal y como se refiere a ella Pedro Gómez, se abalanzara sobre la amiga al grito de «puta».

Finalmente lograron salir de la aglomeración de gente con ayuda de algunos de los presentes allí, evitando que «la agresión fuese a más».

La cara hinchada, un ojo cerrado y sangrando

La agresión, según explica Gómez, dejó a su amigo «con la cara hinchada, el ojo cerrado y sangrando».

«No pude evitar acordarme de Samuel. No pude evitar pensar que podía haber sido yo el primero que hubiera pasado por allí y el que se hubiera llevado los golpes. No pude evitar pensar en lo cerca que está la homobofia de todos nosotros, que nadie está a salvo mientras se siga sin educar a estos salvajes», lamentaba en su publicación el joven que ha sacado a la luz esta historia.

Por último, expresaba que «todo está denunciado y solo espero que el peso de la ley caiga sobre esta chica y sus amigos llenos de odio. Basta ya».

El de este fin de semana es un triste capitulo más en esta lacra que sufren muchas personas LGTBI, puesto que siguen existiendo intolerantes que no dejan vivir a los demás su vida como ellos la eligen.

 

Por ello Pedro Gómez mostraba en el hilo la «admiración» que siente hacia Miguel Ángel por ser «una persona que vive en libertad y muestra el amor a su pareja, Diego, delante de todo el mundo» y que lo hace «en un pueblo de 2.000 habitantes».

«Ni siquiera la aceptación que parecía tener en el pueblo le hizo salvarse de la homofobia de una chica y su grupo de amigos a los que pareció incomodar», lamenta.

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