La Unidad Canina de la Guardia Civil se ha incorporado hoy viernes a las tareas de búsqueda del cadáver de la mujer embarazada de Cifuentes (Guadalajara) presuntamente asesinada por su pareja, a la que habría arrojado hace un par de semanas a un vertedero de animales adonde acuden las aves carroñeras.
Según han informado a Efe fuentes de la investigación, a las tareas de búsqueda en el muladar de La Riba de Saelices (Guadalajara) también participan efectivos del Seprona y de la Policía Judicial de la Guardia Civil, aunque reconocen que las tareas de búsqueda se presentan complicadas por las circunstancias del crimen.
El presunto homicida, José Miguel B.V., que regenta una carnicería en la localidad, está detenido y confesó ayer el crimen a la Benemérita después de que los servicios sociales de Cifuentes dieran la voz de alerta al no tener noticias de la mujer, de origen sudamericano, desde hacía semanas.
El presunto homicida contaba en las últimas semanas a los vecinos del municipio que ella, embarazada de siete meses, le había abandonado y que le había dejado con los cuatro hijos de la mujer, fruto de una relación anterior.
Agentes de la Policía Científica de la Guardia Civil estuvieron durante varias horas ayer registrando el domicilio del detenido, que se encuentra en la plata superior de la carnicería que regenta en el centro de Cifuentes, de unos 2.000 habitantes.
Los vecinos han mostrado su sorpresa ante el comportamiento de José Miguel B.V. en los últimos días, pues actuaba con normalidad a pesar de que supuestamente ya había matado a Carolina C.C., y había arrojado su cuerpo a un muladar -un vertedero de animales donde van a alimentarse los buitres- en La Riba de Saelices, en la misma provincia.
PODRÍA LLEVAR CASI UN MES MUERTA
Por otro lado, la mujer supuestamente asesinada por su pareja podría llevar casi un mes muerta.
Según ha informado el subdelegado del Gobierno en Guadalajara, Juan Pablo Sánchez-Seco, los hechos habrían tenido lugar a finales de septiembre si bien la denuncia no se interpuso hasta el día 18 de octubre.
Entonces, el presunto asesino, Miguel D.V., se puso en contacto con el exmarido de la víctima y padre de sus tres hijos «informándole de su desaparición para que fuera a recogerlos» a mediados de este mes.
El exmarido de la mujer tenía una orden de alejamiento de la desaparecida y al acudir a la localidad puso sobre aviso a los servicios del Centro de la Mujer de Cifuentes que tuvieron conocimiento de la desaparición de la mujer asesinada ante la Guardia Civil.