Los usos de la cerámica de Talavera de la Reina (Toledo) son muy variados. Desde platos hasta fachadas de edificios, pasando por elementos puramente decorativos, este arte tan especial y reconocible está mucho más presente en el día a día de lo que te puedes imaginar. Incluso paseando por calles de Madrid, como en las céntricas Preciados, Gran Vía, Puerta del Sol o la plaza del Dos de Mayo, puedes observar cerámica talaverana. Te contamos su historia.
La empresa Las Calles del Viejo Madrid, que desde 2011 hace reproducciones de los rótulos cerámicos madrileños, cuenta en su página web la relación de Talavera con estos elementos de la vía pública.
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Cerámica de Talavera en las calles de Madrid
El ceramista Juan Ruiz de Luna encendió su primer horno en el alfar Nuestra Señora Del Prado de Talavera el 8 de septiembre de 1908, que estuvo abierto hasta el año 1962.
Durante ese tiempo la cerámica talaverana resurgió, y la familia del también empresario continuó la trayectoria artística, entre ellos uno de sus nietos: Alfredo Ruiz de Luna.
Él montó un taller en la ciudad de Madrid y en 1992 ganó el concurso del Ayuntamiento de la ciudad para realizar las placas de la almendra central de la ciudad.
Así, entre 1992 y 2012, diseñó y pintó 385 placas cerámicas del casco histórico de la capital de España, además de realizar centenares de decoraciones para diversos establecimientos a lo largo y ancho de la geografía.
Desde el año 1993, Juan Ruiz de Luna, bisnieto del fundador de la saga y sobrino de Alfredo Ruiz de Luna, continúa con la tradición familiar.
Actualmente, desde 2011 y tras cinco años realizando decoraciones en la isla de Ibiza, lo hace a través de la empresa Las Calles del Viejo Madrid.
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