El partido municipalista Aike ha reclamado a la Junta y al Ayuntamiento de Guadalajara soluciones para el aula de Usanos, clausurada desde noviembre de 2023, y sobre la que, según la formación, no se ha hecho ninguna intervención durante todo este tiempo. «Una situación de dejadez y abandono por parte de las dos administraciones que impide que los niños y niñas de Usanos tengan clases con normalidad», advierten.
A punto de acabar el curso escolar, el grupo municipal Aike ha puesto la atención en el estado en el que se encuentran algunas instalaciones educativas, denunciando la situación de Usanos, perteneciente al Centro Rural Agrupado Francisco Ibáñez, donde el aula que se desalojo de urgencia en noviembre de 2023 sigue cerrada e inutilizable.
«Ni la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, ni el Ayuntamiento, han realizado ningún tipo de intervención para que los niños y niñas puedan volver a usar el aula, lo que limita el espacio del colegio a dos aulas y dificulta el desempeño de la labor educativa», aseguran desde Aike, quien avisa de que en este tiempo se han agravado las humedades, el moho, las condiciones del suelo, techo o paredes, además del equipamiento y mobiliario.
Según Aike, durante dos cursos escolares Junta y Ayuntamiento se han dedicado a «echar balones fuera», incapaces de actuar ante una situación de urgencia», afirma Susana Martínez, concejala de Aike.
«Lejos de ofrecer soluciones y realizar la obra necesaria, se han tomado decisiones que no garantizan la seguridad y el bienestar de los menores, reubicando a una parte del alumnado en un espacio que carece de las condiciones para estar todo un curso escolar que dificulta el buen desempeño de la labor educativa, como han señalado las familias ante las dos administraciones sin que hayan tenido ninguna respuesta».
Para no prolongar esta situación otro curso más, desde Aike piden acuerdos y coordinación entre la Delegación de Educación y el Ayuntamiento para no seguir perjudicando a los niños y niñas de Usanos, realizar las inversiones necesarias para que pueda usarse el aula y, mientras tanto, instalar un aula modular que ayude a paliar las limitaciones de espacio, sin segregar al alumnado, ofreciendo un espacio que permita los apoyos, desdobles y un buen funcionamiento del centro.
Además del estado de las instalaciones educativas de Usanos, desde Aike también señalan las deficiencias de otros centros educativos de la ciudad que a lo largo del curso han tenido serios problemas con la calefacción, cuestiones básicas de accesibilidad en el CEIP Balcón del Tajo o el gimnasio del colegio San Pedro que necesita mejoras evidentes en baños, accesos, suelo y especialmente en la climatización, ya que no tiene calefacción alguna.