Los múltiples cambios a la izquierda en las últimas elecciones municipales no se han notado a la baja en la contratación de los espectáculos taurinos, tanto populares como «oficiales» (lidias) en Castilla-La Mancha, en parte porque las programaciones ya estaban decididas por las Corporaciones anteriores.
Y ello durante un verano especialmente trágico en España, que se ha saldado con cerca de una decena de muertos ocurridos sobre todo en los festejos populares, uno de ellos en el encierro de Villaseca de la Sagra (no es la primera vez que ocurre en este municipio toledano durante sus fiestas).
A nivel nacional, la clara tendencia que da en los últimos años es una gran reducción de los espectáculos taurinos oficiales (corridas, becerradas y novilladas) en favor descaradamente de los espectáculos populares (suelta de reses y encierro de reses por vías urbanas y el campo). En alguna de las delegaciones de la Junta de Castilla-La Mancha (que son las que conceden los permisos a petición de los ayuntamientos), como la de Ciudad Real, se apunta a motivos económicos (son mucho más baratos los populares que los oficiales), pero es cierto que la totalidad de los Consistorios, plegándose al clamor popular (aunque cada vez hay más oposición a cualquier tipo de espectáculos taurinos) siguen organizando verano tras verano infinidad de espectáculos de este tipo.
Esta inveterada tradición de espectáculos taurinos en las fiestas veraniegas de los pueblos de Castilla-La Mancha, como en el resto de España, se ha mantenido tanto con el PP como con el PSOE al frente de los ayuntamientos. Por parte de Izquierda Unida, su voz en la Diputación de Toledo, Jorge Vega, decía que, aunque la postura generalizada de la formación es contraria a estos festejos, apunta a que dejan a cada regidor o edil adoptar la postura que crea más adecuada.
Eso sí, se han dado dos casos singulares, uno en la provincia de Toledo y otro en la de Ciudad Real, dejando tristemente aparte la tragedia del muerto por asta de toro acaecido en el encierro de Villaseca.
VILLAFRANCA DE LOS CABALLEROS: DE TOROS A LIBROS ESCOLARES
Especialmente singular, incluso internacionalmente, fue la decisión del alcalde de Villafranca de los Caballeros (Toledo), el socialista Julián Bolaños, de destinar la habitual subvención de 10.000 euros a los espectáculos taurinos a libros gratuitos para escolares. La sorpresa aumentaba cuando se supo que la decisión era compartida, «aunque en el fondo pero no en la forma» -por eso se abstuvo- por la oposición del Partido Popular.
La decisión hizo que los 18.000 euros fueran a parar a un programa de libros y material escolar gratuito paa las familias del municipio. La iniciativa fue de tal calado, tan extraordinaria, que provocó el interés de algunos medios informativos internacionales, como la agencia de noticias Asociated Press (que visitó la localidad) y el diario británico «The Guardian», que llamó «Bulls or Books» («toros o libros») a la iniciativa.
ALMAGRO: «NO» PERO POR MOTIVOS ECONÓMICOS
Por otro lado, aunque en este caso la noticia se debió a un motivo económico, el Ayuntamiento de Almagro no firmó el contrato que tenía apalabrado con el empresario taurino Eloy Lillo por diferencias, decimos, económicas. El Consistorio consideró las condiciones «inaceptables», ya que aquel debía garantizar 290.000 euros de recaudación al empresario.
Lillo, un empresario taurino de máxima referencia a nivel nacional, no entendía esta decisión argumentando que las condiciones eran las habitules en este tipo de espectáculos y recordando su prestigio consolidado en el ámbito taurino empresarial.
MUCHOS MÁS FESTEJOS QUE CORRIDAS
Por otro lado, según los datos recogidos por encastillalamancha.es, lo que sí se aprecia en Castilla-La Mancha es una clara preponderancia de los festejos populares frente a las corrridas, además del aspecto ya resaltado de que el cambio político no se ha traducido en un descenso de los espectáculos programados.
Así, en la provincia de Albacete (donde los datos del verano de 2015 se recogieron hasta el 6 de agosto), en todo el verano la Junta concedió 50 lidias frente a 271 festejos populares; mientras que en 2015 los pueblos celebraron (en el periodo mencionado) 19 festejos oficiales frente a los 123 festejos populares. Apréciase la diferencia de los segundos respecto a los primeros y a que la proporción de los festejos de 2015 se mantenía frente a los de 2014.
En cuanto a la provincia de Cuenca, en 2014 la Junta concedió 86 profesionales (lidias) contra los 203 populares; mientras que este verano de 2015, hasta principios de agosto, se celebraron 32 festejos profesionales por los 102 populares.
Donde tamvién ha apreciado mayor incidencia aún de los festejos populares frente a los profesionales ha sido en la provincia de Guadalajara, que ofrece datos solo de 2015, hasta el 1 de agosto: 55 a 9 es el «marcador».
Ya en la provincia de Ciudad Real, el número de festejos taurinos de ambos tipos casi ha sido igual en el verano de 2014 que en el de 2015: 72 en 2014 por 73 en 2015. Y en esta provincia, además, el aumento de las fiestas populares en detrimento de los oficiales se ha producido aún más en 2015 frente a los datos de 2014. Así, la proporción en 2015 ha sido de 47 a 26 en agudo contraste con los 39 a 33 de 2014.
Por último, en la provincia de Toledo, sobre la que la Delegación ha aportado la estadística anual correspondiente a 2014, se aprecia muy claramente la mayor incidencia, casi el doble, de los espectáculos populares sobre los profesionales: 257 frente a 143.