La cooperativa El Progreso, de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real), ha generalizado la vendimia, con el inicio de la recogida de la uva blanca Airén, su variedad más mayoritaria, desde este pasado fin de semana. Una cosecha que está resultando “sorprendentemente baja”, en palabras de su presidente, Jesús Julián Casanova.
“Teníamos la impresión por los primeros sondeos que la cosecha sería inferior al año pasado, aunque ahora vamos viendo que será sorprendentemente más baja de lo esperado, por encima del 20 por ciento de merma, porque, por las entradas, vemos que durante la pasada campaña había unos 20 millones de kilos al 6 de septiembre, el ecuador de la campaña, y este año se prevé que ronde por los 16 millones de recogida, por lo que la cosecha final podría ser una de las más bajas de los últimos 10 años, y creemos que estaría por debajo de los 70 millones de kilos”, comenta Casanova, presidente de El Progreso y de VIDASOL, grupo que espera recoger unos 125 millones de kilos de uvas.
Estima una vendimia de unos 24 millones de hectolitros de vino y mosto en Castilla-La Mancha
Uva de gran calidad
Casanova añade que “la uva que entra es de gran calidad, y con un grado más de media respecto al año anterior por esta época, cuando llevamos casi un mes desde que comenzó la vendimia, pero sin duda el pedrisco sufrido este verano y esas tres semanas de calor intenso que tuvimos en agosto ha hecho que el tamaño de la pulpa de la uva sea más pequeño de lo esperado”.
En El Progreso, una de las principales productoras y exportadoras de Europa con más de 2.300 socios, ya recogieron las variedades más tempranas (Chardonnay, Sauvignon Blanc, Moscatel, Verdejo y Tempranillos de secano, Macabeos, Tempranillos de regadío, Garnacha tintorera, Cabernet Sauvignon, Merlot), y otras variedades minoritarias como el Syrah, y comenzaron a recoger la Airén desde el pasado viernes.