Hay una confitería en Mora (Toledo) desde la friolera de 163 años (data de 1862) que, además de ser uno de los negocios más antiguos de España, es un referente de los dulces en su pueblo y más allá: ‘Sobrino de Cañaveral’ (calle Imagen, 5, 45400 Mora, Toledo).
Dulces por el Pilar: mucho trabajo
Es tal la demanda que tienen que, cuando ENCLM llamó a su dueño, Juan José Fernández Cañaveral Ramírez, este se excusó amablemente porque, en vísperas del Pilar, tienen mucho trabajo. Eso sí, siguen al pie del cañón, a pesar de dos bulos aparecidos en las redes sociales que anunciaban el cierre de la confitería. «Según estos, hemos cerrado cinco veces, las mismas veces que me habría jubilado», afirma Juan José.
La confitería se llama ‘Sobrino de Cañaveral’ porque el primer obrador fue el tío abuelo de Juan José, José Fernández Cañaveral, quien no tuvo hijos. El abuelo empezó a trabajar con él, quedándose con el negocio creado por José. El abuelo, llamado Indalecio (así llaman en Mora a la confitería), fue quien le puso el nombre definitivo al negocio, que ya va por su cuarta generación.

Algunos de los dulces de ‘Sobrino de Cañaveral’. Foto: ‘Sobrino de Cañaveral’.
Las pastas de almendra, la joya de la corona
Juan José y su esposa, Rosa Martín, se afanan día a día en el trabajo. ‘Sobrino de Cañaveral’ tiene en las pastas de almendra a su joya de la corona. También se esmeran en la confección de las delicias (cree Juan José que la receta viene del tío abuelo). Nadie las hace como ellos.
Este viejo negocio está ubicado en una tienda que tiene un sabor muy añejo, ya que los dueños actuales conservan un mobiliario de segunda mano comprado por el tío abuelo José, que bien podría tener 250 años.
Las variedades
La confitería Sobrino de Cañaveral ofrece una variedad de especialidades típicas como el mazapán, las pastas de almendra, las delicias, y las marquesas. Cada uno de sus productos es una auténtica obra de arte, elaborada con ingredientes de la más alta calidad, siguiendo recetas que han pasado de generación en generación.
Estos maestros confiteros no solo venden dulces, sino que ofrecen explicaciones detalladas y hasta catas para que la espera sea más agradable.
Otra característica de ‘Sobrino de Cañaveral’ es su versatilidad, ya que ofrece servicios de recogida en tienda, compra en tienda, para llevar, comida en la tienda y hasta entrega a domicilio.
Y para quienes tienen restricciones alimenticias, esta pastelería también aporta soluciones, dado que mchas de sus pastas tienen una base de almendras sin harina, así que son aptas para celíacos.