El Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Ciudad Real ha investigado a siete personas y ha logrado esclarecer diez hechos delictivos relacionados con la caza furtiva en distintos puntos de la provincia, tras intensificar en los últimos meses los servicios de control ante un incremento de episodios durante la época de berrea.
La estrecha colaboración con las guarderías de varias fincas de caza mayor ha permitido detectar movimientos sospechosos, establecer dispositivos específicos y obtener resultados relevantes.
Almuradiel: tres investigados y un arma robada intervenida
En una finca de caza situada en Almuradiel, la patrulla de Viso del Marqués tuvo conocimiento en septiembre y octubre de la aparición de varios ciervos abatidos con los cuernos serrados. Para tratar de identificar a los responsables, se organizaron vigilancias conjuntas con la guardería de la finca.
A mediados de octubre, los agentes sorprendieron in fraganti a dos cazadores furtivos tras realizar tres disparos, que no llegaron a abatir ninguna pieza. Uno de ellos fue detenido en el acto y el segundo quedó investigado tras ser identificado posteriormente. Un tercer implicado también fue investigado, logrando así aclarar varios delitos atribuidos al mismo grupo.
En la intervención se localizó un arma con la numeración borrada, equipada con visor nocturno y silenciador, así como una mochila con cuchillos de caza, munición y otros utensilios. Las comprobaciones posteriores revelaron que el arma procedía de un robo con fuerza cometido en Huelva en 2021, donde se sustrajeron varias armas de fuego. En ese mismo robo figuraba una escopeta, también con numeración borrada, intervenida este mismo año por la misma patrulla en San Lorenzo de Calatrava.
Las armas han sido enviadas al laboratorio de Balística del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil en Madrid. A los tres investigados se les atribuyen delitos contra la flora y fauna, pertenencia a grupo criminal, desobediencia y resistencia a la autoridad y robo con fuerza.
Abenójar: dos personas sorprendidas tras abatir dos ciervos
En Abenójar, y tras detectar nuevos indicios de furtivismo, la patrulla del Seprona de Almadén abrió otra línea de investigación y activó servicios coordinados con las guarderías de varias fincas. En uno de estos dispositivos, los agentes sorprendieron a dos personas que habían entrado sin autorización y abatido dos ciervos adultos sin permiso del titular cinegético.
Almadén: un delito resuelto por coincidencia balística y fototrampeo
La misma patrulla logró esclarecer otro delito de furtivismo ocurrido en Almadén, donde fue abatido un venado. La investigación se resolvió gracias a la coincidencia balística con un caso registrado en Abenójar y a las imágenes obtenidas por fototrampeo, en las que aparecían los mismos dos cazadores. A ambos se les imputan dos delitos contra la flora y fauna, y se intervino un rifle de caza mayor empleado en los hechos.