Un jurado popular se encargará de juzgar la próxima semana, en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, a E.S.R., un hombre de 32 años de edad, acusado de asesinar a su mujer, de 24 años, en la localidad ciudadrealeña de Piedrabuena en enero de 2023, y para el que la Fiscalía pide una pena de prisión de 29 años.
Según se desprende del escrito de acusación, los hechos ocurrieron en la madrugada del 8 de enero de 2023, cuando el acusado, tras sufrir un ataque de celos debido a que la joven había salido con sus compañeras del equipo femenino de fútbol sala de la localidad a cenar y continuar la celebración del Día de Reyes, la esperó en el portal del domicilio familiar y, tras una fuerte discusión, acabó con su vida de una puñalada en el cuello con un cuchillo jamonero.
Tal y como recoge el escrito del Ministerio Fiscal, esa noche el acusado realizó un seguimiento constante de su pareja, enviándole numerosos mensajes con contenido vejatorio y realizando hasta 17 llamadas en apenas media hora, instándola a volver a casa con expresiones como “temprano te quiero ver” o “yo me voy a casa ya, deja de follar, coño”.
Cuando la víctima regresó al domicilio sobre las 2:30 de la madrugada, el acusado la abordó en el portal. Subieron juntos al piso, donde se inició una violenta discusión que fue escalando hasta que, ya en la cocina, el acusado la atacó con un cuchillo de grandes dimensiones, asestándole una puñalada letal en el cuello. La herida le seccionó la tráquea y estructuras vitales, provocándole la muerte en cuestión de minutos por insuficiencia respiratoria aguda.
Detenido el marido de la mujer de 24 años asesinada en Piedrabuena (Ciudad Real)
Por estos hechos, el Ministerio Fiscal solicita para el acusado una pena de 25 años de prisión por un delito de asesinato con la agravante de parentesco y de género, al considerar que actuó con alevosía y motivado por el control y sometimiento que ejercía sobre su pareja desde hacía años.
Además del delito de asesinato, la Fiscalía le imputa un delito continuado de maltrato habitual, así como tres delitos de maltrato de obra, dos delitos de vejaciones injustas y un delito de coacciones leves, todos ellos enmarcados en el ámbito de la violencia de género, por los que suma una petición total de 29 años y seis meses de prisión.
En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público reclama que el acusado indemnice con 250.000 euros a su hija menor de edad por el daño moral y la pérdida de su madre, así como 50.000 euros a cada uno de los padres de la víctima y 30.000 euros a su hermana, sumando un total de 380.000 euros en indemnizaciones.
Asimismo, el escrito de acusación solicita que se imponga a E.S.R. la inhabilitación absoluta durante la condena, la retirada de la patria potestad sobre su hija, y la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de 500 metros de sus familiares directos durante 30 años, incluyendo cualquier medio telemático o digital.
Maltrato prolongado desde 2013
El acusado mantenía una relación sentimental estable con la víctima desde 2013. Ambos convivían en Piedrabuena y tenían una hija en común, nacida en enero de 2020. Pese a la apariencia de normalidad, la relación estaba marcada desde hacía años por un clima de control, sometimiento y violencia.
El fiscal sostiene que el acusado ejercía “un fuerte control y dominio sobre su pareja”, ya que “la insultaba, la despreciaba, controlaba su teléfono móvil y sus redes sociales, y la llamaba de manera compulsiva cuando no estaba en casa”.
Era habitual que la increpara y le gritara en público, sin preocuparse por las consecuencias o la presencia de testigos. En más de una ocasión, incluso habría llegado a agredirla físicamente, aunque sin causar lesiones documentadas, señala el escrito del Ministerio Fiscal.
Este ambiente de intimidación constante generó en la joven una situación de angustia persistente que la obligó a acudir con frecuencia al centro médico del municipio y, dada su situación emocional, fue derivada al Hospital General Universitario de Ciudad Real, donde recibió tratamiento psiquiátrico y psicológico.
A lo largo de los últimos años, la violencia fue escalando. Durante las fiestas patronales del verano de 2020, el acusado la habría sacado a la fuerza de un local de ocio tras darle un fuerte tirón del pelo. Un año más tarde, en octubre de 2021, durante una boda de amigos comunes, le propinó una patada y un empujón en presencia de varios invitados. En diciembre de ese mismo año, tras una nueva discusión en un bar de la localidad, le dio una patada en la pierna y, al recriminarle ella su comportamiento, él respondió escupiéndole a la cara.
Todos estos hechos se sucedieron hasta enero de 2023, cuando el acusado acabó con la vida de la joven, dejando a un bebé de tres años en el momento que se produjo el crimen.
El juicio oral, que se desarrollará en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real los días 23, 26, 27, 28 y 29 de mayo, contará con la intervención de un Tribunal del Jurado, al tratarse de un delito grave de asesinato.