La ciudad de Cuenca llora la pérdida de Santiago Grisolía. El bioquímico valenciano ha muerto a los 99 años, una persona muy vinculada con la ciudad de Cuenca, donde pasó su infancia y adolescencia.
Nombrado Hijo Adoptivo de la ciudad, el científico fue premio Príncipe de Asturias en 1990 y es el impulsor del proyecto del genoma humano.
Pésame desde Cuenca
El Ayuntamiento de Cuenca ha mostrado sus condolencias en un comunicado de prensa. En el mismo, el alcalde de la ciudad, Dario Dolz, ha querido trasladar un mensaje de condolencias a su familia en nombre de toda la Corporación y de la ciudad en general, donde además el bioquímico tiene un Instituto de Educación Secundaria que lleva su nombre.
Y es que el IES Santiago de Grisolía es uno de los institutos más famosos de la ciudad, un homenaje de Cuenca a uno de sus ciudadanos de adopción.
Discípulo de Servero Ochoa
Santiago Grisolía nació en Valencia en 1923. Estudió Medicina en las Universidad de Valencia y Madrid y fue discípulo nada más y nada menos que de Severo Ochoa. A los veintidós años se marchó a Estados Unidos y durante muchos años fue profesor en las Universidades de Kansas. Chicago y Wisconsin. Premio Príncipe de Asturias en Investigación Científica en 1990 e impulsor del proyecto del genoma humano, Santiago Grisolía es uno de los científicos españoles más destacados de su tiempo.
Es Doctor Honoris Causa por 15 universidades de todo el mundo y miembro destacado de las principales sociedades científicas internacionales.
En la ciudad de Cuenca, también ha sido presidente del Consejo Asesor del Museo de las Ciencias de Castilla-La Mancha, situado en Cuenca.