A 45 minutos de Guadalajara capital y a menos de una hora y media de Madrid nos encontramos en Alcolea del Pinar una casa muy particular, la Casa de Piedra de Lino Bueno, una construcción rupestre que tardó 21 años en construirse.
El autor, Lino Bueno, comenzó a trabajar en 1907 con la intención de construir una habitación donde poder alojar a su familia, pero después de esa primera etapa siguió construyendo hasta la 1927 (aunque Lino nunca dio por finalizada la construcción), agregando varias habitaciones, una cocina, un comedor o cuarto de estar, pasillos, una cuadra y una cochiquera, todas ellas unidas y excavadas con herramientas manuales, durante las noches después de su día como trabajador manual del campo. También el mobiliario y accesorios necesarios para la habitabilidad están tallados en la misma roca como son alacenas, escaleras, desagües, armarios, mesa, pesebres, chimenea.

Lino Bueno con su pico
La casa dispone de dos plantas, si bien la superior está en dos niveles distintos para poder vencer la mayor altura de la cocina de la planta inferior, sobre la que pasa. En la habitación de arriba se encuentra un inicio de excavación de una nueva habitación, que debería haberse unido con el trabajo, también inacabado, del balcón izquierdo de la fachada principal.
La fachada, en vista frontal, se compone de la puerta de acceso, una puerta a la izquierda que da acceso a la cochiquera (posteriormente convertida en trastero y leñera), la ventana del recibidor en la planta baja, y el balcón de la habitación superior, y a la misma altura el hueco que sería el balcón de la nueva habitación, inacabada. A la derecha se encuentra la verja que da al patio lateral, donde desagua la pila interior, se accede a la cuadra y abren otras ventanas.

Habitación Casa Piedra
La roca arenisca, típica de la zona, es una peña de una pieza única bastante compacta. Lino utilizó herramientas básicas de hierro para las tareas, como, por ejemplo, el pico con el que aparece en alguna foto de la época. También se ayudó de cinceles o barras de hierro para poder perforar la chimenea. La instalación eléctrica también se hizo en época de Lino y se basa en cables vistos fijados con clavos a la roca.
Visitas reales
La peña era propiedad del Ayuntamiento que la cedió a Lino en 1907 después de petición de él mismo. La Casa de piedra ha sido visitada por dos Reyes: Alfonso XIII y don Juan Carlos I.
En la actualidad se conserva como museo para cualquier visitante de Alcolea del Pinar, el nieto de Lino se encarga de acompañar en la visita por la casa explicando las diferentes estancias y recordando algunas de las anécdotas de su abuelo a la hora de construir una casa, que sorprende a todo aquel que se acerca a conocerla.
Para llegar a Alcolea del Pinar hay que coger la A-2 dirección Zaragoza-Barcelona y en el kilómetro 132 te desvías a Alcolea del Pinar. La visita merece la pena, la Casa de Piedra sorprende por fuera, pero por dentro impresiona a todo el visitante por el gran trabajo de Lino Bueno.