Este 1 de septiembre ha comenzado el plazo para suscribir el seguro de importantes producciones agrícolas de Castilla-La Mancha, como los cultivos herbáceos extensivos, el olivar o los frutos secos, a través de los módulos que incluyen las opciones de aseguramiento más amplias.
Es el momento clave para proteger la cosecha 2026 frente a los riesgos meteorológicos más severos, como la sequía, el pedrisco o las heladas, que han estado muy presentes en las últimas campañas, señalan desde Agroseguro.
Cultivos herbáceos
Para los cultivos herbáceos, se abre el periodo para asegurar la cosecha 2026 de las producciones de trigo, cebada, avena, centeno, arroz, girasol, maíz, garbanzo, lenteja y judía, entre otras, a través de los módulos 1 y 2 en secano, que incluyen los riesgos de sequía, asurado, pedrisco, no nascencia, no implantación, incendio o fauna entre sus coberturas.
Además, y al igual que en las pasadas campañas, Agroseguro renueva la bonificación del 5% para aquellos productores que hayan contratado los módulos 1 o 2 en secano en el plan anterior y vuelvan a suscribir estos módulos para la cosecha 2026 antes del 30 de septiembre, 31 de octubre o 15 de noviembre (en función del ámbito y del cultivo).
En las últimas cuatro campañas –todavía con datos estimados sobre la cosecha 2025–, la sequía y el pedrisco han provocado indemnizaciones superiores a los 770 millones de euros, si bien es la sequía el fenómeno que ha generado los mayores daños, con cerca de 600 millones, debido, sobre todo, a la falta de precipitaciones del año 2023, por la que los productores de cultivos herbáceos recibieron más de 400 millones de euros.
Creciente siniestralidad
La creciente siniestralidad de los últimos años ha contribuido a afianzar una tendencia de aseguramiento positiva. Así, para proteger la cosecha 2025 de cultivos herbáceos, se contrataron más de 128.500 pólizas, lo que supone un crecimiento respecto a la cosecha anterior superior al 5,5%.
La superficie contratada ascendió a más de 5 millones de hectáreas (un 4,7% más que durante la campaña anterior) y la producción asegurada fue de casi 21 millones de toneladas, es decir, un 16% más). El capital asegurado, por su parte, creció un 9%, hasta superar los 4.600 millones de euros. Cabe recordar, además, que la cosecha 2024 ya registró un crecimiento muy significativo respecto a la anterior.
Olivar y frutos secos
En el caso del olivar, los módulos de otoño (módulos 1 y 2) ofrecen protección frente a daños por sequía, pedrisco, lluvia, helada, viento o incendio, entre otros riesgos, y permiten contratar dos cosechas consecutivas, con el cálculo de las indemnizaciones de manera independiente para cada campaña.
En septiembre también comienza el plazo para suscribir el seguro de frutos secos (almendro y avellano) frente a los riesgos de pedrisco, helada, sequía y riesgos excepcionales (lluvia, inundaciones, incendios o viento), así como el seguro para las producciones de níspero, castaño, higuera, kiwi y endrino.