La Asociación de Jóvenes Agricultores (ASAJA) y la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) han sido reconocidas como organizaciones agrarias más representativas de Castilla-La Mancha.
El Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM), consultado por EFE, publicaba este viernes sendas resoluciones de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural por la que se reconoce a ambas entidades como organizaciones profesionales agrarias representativas en Castilla-La Mancha por un plazo de cinco años.
Ley de determinación de la representatividad
Estas resoluciones han recordado que la ley de determinación de la representatividad de las organizaciones profesionales agrarias en Castilla-La Mancha establece las reglas conforme se fija dicha representatividad.
En las mismas, se recogen los requisitos que las organizaciones han de cumplir para poder concurrir al procedimiento para la determinación de la representatividad y los criterios para la determinación de la representatividad.
Tras los procedimientos correspondientes para que las entidades interesadas presentaran sus solicitudes y la documentación acreditativa, se ha comprobado que ambas tanto ASAJA como UPA han acreditado estar constituidas y reconocidas como organización profesional agraria de carácter general y de ámbito general y regional al amparo de la ley sobre regulación del derecho de asociación sindical, formando parte de una estructura a nivel estatal, que a su vez es miembro del Comité de Organizaciones Profesionales Agrarias.
Al menos, tres años de antigüedad
Se ha acreditado, también, tienen inscritos sus estatutos en el Registro de la autoridad laboral competente de ámbito regional como organización profesional con, al menos, tres años de antigüedad a la fecha de la entrada en vigor de la ley de determinación de representatividad.
Asimismo, han acreditado que son una organización profesional agraria de carácter general, no sectorial; que figura entre sus objetivos estatutarios la defensa de los intereses generales de la agricultura; que tiene implantación efectiva en las cinco provincias de Castilla-La Mancha y que acredita una participación mínima del 40 por 100 de mujeres en sus órganos de dirección.