Cuatro alumnos con necesidades especiales del colegio concertado católico Virgen del Carmen de Toledo van a ser excluidos del servicio de comedor después de que la Consejería de Educación haya recortado el número de auxiliares técnicos educativos (ATE), lo que ha provocado que el centro considere que los menores no pueden ser atendidos «en condiciones» y que la dirección haya decidido que algunos se queden fuera del comedor. Una medida que uno de los padres de estos alumnos desee colegio conocido como Carmelitas considera «discriminatoria».
Antonio Lozano, progenitor de uno de los niños afectados, ha explicado a ENCLM que el Gobierno de Emiliano García-Page ha reducido en 87 horas semanales la dotación de los recursos de ATE, pasando de un crédito semanal de 152 horas en el anterior curso académico a 65.
De esta forma, ha trasladado el padre, ya no van a trabajar cuatro profesionales sino dos.
Así, de 11 niños con necesidades especiales que hay en el colegio y que requieren de ayuda para poder comer, cuatro se van a quedar sin comedor a partir del 1 de octubre porque el colegio ha considerado que no se los puede atender con normalidad con los recursos asignados.
El centro ha sido el que ha decidido qué alumnos son los que continúan con el servicio y cuáles no.
El padre apunta a la responsabilidad de la Junta y del colegio
«La responsabilidad es supuestamente de la Junta, que hace el recorte, pero el colegio se lava las manos», ha asegurado Antonio, porque la directora del centro les ha trasladado «que tenemos razón, pero que es lo que hay».
De hecho, la directora, en una carta a las familias afectadas, habla de una «reducción absolutamente injustificada» y de «recursos tan limitados que hacen inasequible el cuidado» que los alumnos requieren. De esta forma, «en un contexto en el que no podemos garantizar una atención de calidad y segura de su hijo (…) lamentamos informarles de que no podrá hacer uso del servicio de comedor a partir del 1 de octubre».
El padre también ha reprochado al colegio que no destine recursos económicos propios para contratar a más auxiliares.
«Dan la patada a los que más lo necesitan»
Antonio ha criticado que estamos «ante una discriminación a niños con necesidades especiales. Les dan la patada a los que más lo necesitan».
Y es que, ha añadido, «el comedor es una terapia para ellos. Aprenden a socializar, están con más niños».
Antonio Lozano ha avisado que los padres darán la batalla para que sus hijos vuelvan a tener servicio de comedor en el Virgen del Carmen de Toledo. «Vamos a ir donde haga falta», bien sea, ha señalado, a la consejería de Educación o los medios de comunicación, algo que él ya está haciendo.
La Junta recuerda: el colegio puede alegar
ENCLM se ha puesto en contacto con el Delegado de Educación en la provincia de Toledo, José Gutiérrez, quien ha asegurado entender «perfectamente» la situación por la que están pasando las familias -a las que tiende la mano- y ha indicado que el centro puede alegar si considera que el número de auxiliares no es suficiente.
Ha explicado que los recursos públicos extraordinarios de ATES «son proporcionalmente los mismos» en todos los centros públicos y concertados y que se revisan anualmente porque el número de alumnos con necesidades especiales cambian.
Además, ha insistido en que estos recursos son adicionales al concierto educativo entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y el colegio.
Para este curso se ha determinado que en el colegio Virgen del Carmen tiene que haber este curso dos auxiliares, uno con un contrato de 30 horas para los cursos de primaria y otro de 35 horas para secundaria.
«La organización del comedor depende del centro»
A raíz de que la Junta otorga a estos profesionales, «la forma de organizar el comedor es una decisión pura y dura del propio centro educativo«, ha remarcado Gutiérrez.
De cualquier forma, este martes ha habido una inspección por parte de la delegación provincial en el colegio, un encuentro en el que «se han visto sobre el terreno» las necesidades del alumnado afectado y en el que se ha recordado a la dirección del centro la posibilidad de que presente alegaciones si no está conforme con la decisión de la Junta, acción que, al parecer, se va a producir este martes.
El delegado provincial ha confiado en que la problemática «quede resuelta en unos días», bien sea con más auxiliares -si finalmente el colegio alega y se tiene en consideración- o con una reorganización diferente.
José Gutiérrez ha trasladado que «nos ponemos a disposición de las familias», a las que ha dicho que «cualquier que entienda que hay algún tema de discriminación, que se ponga en contacto con la delegación».
