La empresa Servicios Infantiles La Casita de Chocolate S.L, que gestiona desde 2011 las tres escuelas infantiles municipales del Ayuntamiento de Toledo, ha denunciado que el Consistorio les adeuda más de 400.000 euros, «lo que ha generado una tensión crítica en su tesorería», impidiendo «abonar íntegramente las nóminas del mes de octubre».
En un comunicado firmado por el administrador de la misma, Julio González, y remitido a las familias, al que ha tenido acceso Europa Press, avisa de que en la actualidad, el Ayuntamiento adeuda a la empresa «las facturas correspondientes a agosto, septiembre y octubre de 2025, así como los importes pendientes por el equilibrio económico de los cursos 2022/23, 2023/24 y 2024/25″.
Explican que desde 2018 vienen afrontando «una situación económica complicada, consecuencia de las sucesivas subidas salariales aprobadas para las trabajadoras de los servicios municipales que el Ayuntamiento no ha reconocido ni incorporado en la actualización de las tarifas».
«Estas subidas, necesarias y justas, las hemos asumido como empresa con enorme esfuerzo y responsabilidad. A esta circunstancia se suman los retrasos continuados en los pagos municipales, tanto en la subvención mensual como en el equilibrio económico correspondiente a las plazas no ocupadas».
Pese a haber sostenido esta situación durante años «con la mayor prudencia, en los dos últimos ejercicios se ha agravado de manera significativa», han explicado desde la empresa.
En la actualidad, el Ayuntamiento adeuda a la empresa «las facturas correspondientes a agosto, septiembre y octubre de 2025, así como los importes pendientes por el equilibrio económico de los cursos 2022/23, 2023/24 y 2024/25».
En conjunto, esta deuda supera los 400.000 euros, «lo que ha generado una tensión crítica en nuestra tesorería y nos ha impedido abonar íntegramente las nóminas del mes de octubre».
El 50% de las nóminas
Aun así, defienden que han hecho «todo lo posible para garantizar el pago inmediato del 50% de las nóminas, comprometiéndonos a completar el resto tan pronto como el Ayuntamiento efectúe los ingresos pendientes».
Dejan claro que esta situación «no responde a una mala gestión interna, sino a los retrasos en los pagos municipales, que constituyen una parte esencial de la financiación del servicio». Recuerdan que el 75% de sus costes corresponde al personal, y «que los ingresos procedentes de las cuotas familiares no son suficientes para cubrir los salarios y los seguros sociales sin la aportación municipal».
«Durante todos estos años hemos trabajado con la única intención de mantener la estabilidad del servicio y los puestos de trabajo, incluso en los momentos más difíciles. Lamentablemente, la situación se ha visto agravada al comunicarnos los técnicos municipales que se olvidó incluir a las Escuelas Infantiles Municipales en los presupuestos anuales del Ayuntamiento».
Aseguran que la Concejalía les han trasladado «su compromiso de tramitar de inmediato la modificación presupuestaria necesaria y de efectuar el pago de alguna de las facturas la próxima semana, lo que permitiría aliviar parcialmente la situación».
Las cuotas familiares que las familias abonan cada mes se complementan con la citada subvención municipal. A día de hoy, tras dos meses de servicio prestado, las tarifas correspondientes al curso 2025/26 aún no han sido aprobadas en Junta de Gobierno, «lo que dificulta todavía más la gestión administrativa del servicio».
Desde la administración de la empresa insisten en que seguirán «poniendo todo su empeño en que esta situación afecte lo menos posible al funcionamiento diario de las escuelas», pero consideran necesario que las familias conozcan de primera mano el contexto en el que se encuentran.
«Confiamos en que esta situación se resuelva con la mayor rapidez posible y podamos recuperar pronto la normalidad que todos y todas merecemos», esperan desde la empresa, que destaca el «esfuerzo, compromiso y vocación para ofrecer a las familias» y a los niños «un servicio educativo de la máxima calidad».