Toledo pone en el mercado una de las oportunidades de inversión más atractivas de los últimos años: el proyecto Mirador de la Bastida Gran Hotel & Spa, un exclusivo complejo turístico que se plantea levantar en una de las ubicaciones más estratégicas de la ciudad, junto al Parque de La Bastida.
El proyecto, ahora disponible para su adquisición, se ubica en una parcela de 15.060 m² y ha sido diseñado para aprovechar el auge del turismo en la capital castellanomanchega, impulsado especialmente por el éxito del parque temático Puy du Fou, que recibe más de un millón de visitantes anuales.
Características del proyecto
El planeamiento urbanístico aprobado permite una edificabilidad máxima de 8.015 m², con una altura de hasta dos plantas, lo que garantiza la integración armónica con el entorno natural.
El terreno está clasificado como Equipamiento Privado, autorizado específicamente para uso hotelero y espacios complementarios como restaurante, spa, salones de convenciones y aparcamiento.
El diseño contempla un hotel de 200 habitaciones, servicios de alta gama y una arquitectura sostenible con energía solar, aerotermia y sistemas de eficiencia energética. Esta apuesta por la sostenibilidad optimiza costes y sitúa al futuro complejo como referente en turismo responsable.

Imagen del proyecto.
Inversión y valor estimado
La inversión inicial supondría unos 25 millones de euros y en la que se incluye la compra del terreno, la construcción y el equipamiento integral del hotel, tal y como se desprende del anuncio publicado en la página de compraventa Idealista.
Según estimaciones, una vez en funcionamiento, el valor de mercado del establecimiento superará los 35 millones de euros, reforzado por su ubicación estratégica y el déficit de plazas hoteleras de alta calidad en Toledo.
Además de la rentabilidad derivada de la ocupación, los ingresos generados por el restaurante, el spa y los salones de convenciones aumentarán la proyección financiera del complejo.
Ubicación privilegiada
El Mirador de la Bastida Gran Hotel & Spa se situará a solo 2 kilómetros del casco histórico de Toledo y a 6 kilómetros de Puy du Fou.
Su enclave, en lo alto de una colina dentro del Parque de La Bastida, ofrecerá a los visitantes vistas panorámicas únicas de la ciudad, convirtiéndose en un atractivo singular dentro del mercado hotelero regional.