Un turista se bañó este lunes en la fuente de Cristina Iglesias, en la Plaza del Ayuntamiento de Toledo, lo que ha desatado las críticas en redes sociales, al tomarlo como una falta de respeto, además de reprochar que no se indique que no está prohibido el baño en la fuente.
Y es que los 40 grados que está haciendo estos días en Toledo hacen que cualquier sitio con agua sea una buena opción para refrescarse, solo que en este caso se trata de una obra de arte que realizó Cristina Iglesias en 2014 por el año Greco, una de las tres obras que hay repartidas por la ciudad.
«Qué pena que no sepan apreciar esta preciosa escultura», se quejaba en redes sociales una usuaria, quien además reprochaba que «no hay indicadores de prohibido bañarse y del significado que representa esta fuente, que más que una fuente es una gran escultura».
Un homenaje de Iglesias al Tajo
La fuente de la plaza del Ayuntamiento forma parte del proyecto Tres Aguas, con el que la es escultora donostiarra Cristina Iglesias homenajeó al Tajo.
La fuente reproduce el cauce del río Tajo, un lecho enraizado con una gran carga simbólica, puesto que reproduce un ciclo del agua en una secuencia en la que discurre el agua por la fuente, después se vacía para finalmente inundarse y volver de nuevo al inicio, completando así el ciclo del agua.