fbpx
viernes, 25 de julio de 2025
Excavación en el Cerro del Gollino - 24 julio 2025 - Corral de Almaguer

Pablo Sánchez de Oro, investigador predoctoral de la Universidad Autónoma de Madrid, decidió hacer sus tesis sobre la Carpetania, un reto que le ha llevado al Cerro del Gollino, en Corral de Almaguer (Toledo), donde rastrean las huellas de sus primeros pobladores en un asentamiento que permaneció habitando entre el siglo IV y el I antes de Cristo. Junto a él, hay varios codirectores como Lourdes Prados Torreira (Universidad Autónoma de Madrid), Manuel Fernández-Götz (Universidad de Oxford) y Luis Berrocal-Rangel (UAM).

Un oppidum o ciudad amurallada que se extiende en 18 hectáreas de terreno, casi todas aún sin excavar y silentes, a la espera de que estos detectives del pasado excaven y les permitan mostrar la cultura carpetana. Solo van por la segunda campaña, pero ya hay descubrimientos más que interesantes para resolver incógnitas en algunos casos, o desterrar prejuicios en otros, sobre cómo eran y cómo vivían los carpetanos. Lo está logrando el grupo de voluntarios españoles e internacionales formado por Sánchez de Oro, ayudado y alentado por la inquietud activa y resolutiva de la Asociación de Amigos de Corral de Almaguer, que han devuelto al presente una excavación iniciada hace 40 años.


Segunda vida del yacimiento del Cerro del Gollino

Los “voluntarios” de los años 80 del pasado siglo son los catedráticos universitarios del presente, cuenta a ENCLM Rufino Rojo, experto en la historia de Corral de Almaguer y  miembro de la Asociación Amigos. La misma a la que pertenece Julián Lominchar; ellos y Pablo Sánchez Rojo son los auténticos impulsores de la segunda vida del yacimiento de Cerro del Gollino.

En este segundo intento están arrojando luz sobre esta desconocida cultura, asociada a estereotipos que no se corresponden con lo que la excavación va escupiendo. Este sábado volverán a echar arena sobre los restos a los que quieren volver el próximo año. Los próximos meses son para estudiar, reinterpretar y sacar conclusiones definitivas en el propósito de «desenmascarar» a los carpetanos a los ojos del presente.

Nos lo explica Pablo. Ahora toca «reinterpretar de mejor manera el pasado». Por el momento, frente a la extendida imagen de la Carpetania como un espacio encerrado en sí mismo, una sociedad heterárquica y de mayor influencia celta que íbera, se está descubriendo una comunidad conectada comercialmente con las grandes civilizaciones contemporáneas, de Roma a Grecia pasando por Cartago o Fenicia, jerarquizada socialmente y con producción cerámica calcada a los íberos.

Murallas, viviendas, cerámicas, bronce…

Apenas se ha excavado un 1% de las 18 hectáreas que tiene este oppidum en el que llegó a habitar un millar de personas. Eran los primeros castellanomanchegos de esta parte de La Mancha toledana. Solo están en la segunda campaña, hay trabajo para muchas más. Pero ya se ha encontrado rastro de varias murallas, fortificaciones y otros edificios “muy interesantes, que nos hablan de una complejidad urbana y social a la a altura de otros grandes espacios peninsulares”, dice Pablo Sánchez de Oro.

También han salido abundantes cerámicas, tanto de producción local como de exportación, restos de comida y animales, objetos en bronce o plomo… Lo suficiente para confirmar que la base de la sociedad eran la agricultura y la ganadería, pero también constata que comerciaban con las redes predominantes en el Mediterráneo, ofreciendo grano. Se sigue buscando la necrópolis y anhelan lograr la calificación BIC (Bien de Interés Cultural), para poder evitar el expolio al que este espacio se ha visto sometido por el uso ilegal de detectores de metales. Sin duda, necesitan apoyo institucional para seguir avanzando.

Hasta aquí han llegado, fruto de la colaboración internacional, voluntarios de Inglaterra, Escocia, Egipto, Cuba, o Portugal, además de España y, por supuesto, la población local.

Roma acabó con este oppidum bajo fuego y cal en el I a.C. Ahora lo han expoliado salvajemente. Hay que hacer algo. Así lo cuenta para ENCLM Pablo Sánchez de Oro, arqueólogo que dirige la excavación del Cerro del Gollino:

Rufino Rojo, historiador: «Los carpetanos son los primeros manchegos»

Rufino Rojo, historiador de Corral de Almaguer y miembro de la Asociación de Amigos de Corral de Almaguer, estuvo ya con los descubridores del yacimiento hace 40 años. “Los carpetamos son los primeros manchegos, ya que la Carpetania coge parte de Guadalajara, la provincia de Madrid, desde Talavera de la Reina hasta La Mancha, y parte de Ciudad Real, hasta el límite donde empiezan los oretanos”.

Mantiene viva la esperanza de encontrar alguna huella del alfabeto íbero, «que sería importante hasta para la historia de España; se sabe que los carpetanos tienen bastante influencia celta, pero las cerámicas que están apareciendo provienen del Mediterráneo y están haciendo cambiar la idea original de estas tribus de la Península Ibérica». De hecho, anima a otros investigadores a venir: «Creo que vamos a dar un gran avance en el conocimiento de esta zona de La Mancha, sabíamos muy poco de nuestras raíces ibéricas».

Julián Lominchar hace películas tan maravillosas como Robot Dreams, pero como corraleño y miembro de la Asociación de Amigos de Corral, el yacimiento es un reto con el que se ha volcado. Asegura que está siendo «un esfuerzo titánico», pero “formar pare de la historia nacional es algo que no todos los pueblos pueden tener”, dice, al tiempo que pide colaboración para poder dar alojamiento y comida a los voluntarios que participan en las campañas de excavaciones.

Los voluntarios lo tienen claro: «Merece la pena»

El testimonio de los voluntarios tampoco dejar lugar a dudas. Manuel Arévalo, natural de Corral y técnico de sonido, vive en en Madrid pero ama su pueblo y está participando en la campaña de excavaciones. “Para nosotros es conocer nuestro origen nuestro y el del pueblo, saber que tenemos algo de valor es muy importante”. Lamenta que “la gente de Corral está muy remolona para venir aquí”, pero la experiencia merece la pena.

Carmen Cerezuelo, estudiante de Arqueología de la Universidad Autónoma de Madrid, también viene por segundo año y entre los hallazgos en los que ha participado se encuentra el rescate de algunas cerámicas. “Me parece muy interesante aprender de la historia de esta manera; y es una gran experiencia, porque conoces gente, haces piña y encima aprendes un montón”.

¿Merecen la pena el calor, el esfuerzo diario, la frustración del expolio inevitable o la escasez de medios para avanzar más deprisa? La respuesta de todos es clara y contundente: «¡Claro que merece la pena…!»

Fotos | El yacimiento del Cerro del Gollino saca a la luz la vida de los carpetanos en Corral de Almaguer (Toledo)

Yacimiento arqueológico del Cerro de los Gollinos, en Corral de Almaguer (Toledo). Foto: Rebeca Arango.

Mar G. Illán
Mar G. Illán

Periodista talaverana de nacimiento y corazón, casi toda mi carrera periodística ha sido en mi amada Toledo, cuna profesional y muralla. Militante del periodismo local y regional, licenciada en Ciencias de la Información, rama de Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, periodista política durante más de tres décadas y entrevistadora semanal (más de 1.000 entrevistas publicadas). Directora de ECOS desde 1995 y de encastiillamancha.es desde su aparición, con el mismo equipo de ECOS, en 2011, también pasé por ABC y El Día de Toledo. Escribí “Juan Ramón Amores, un idilio con la vida (un desafío contra la ELA), y coautora y codirectora de libros editados por ECOS como «Alimentos de Castilla-La Mancha», «100 encantos en Castilla-La Mancha», o «Diccionario enciclopédico de la Provincia de Toledo», entre otros.

Redes sociales:

(Visited 2.184 times, 1.206 visits today)