El jugador toledano de balonmano Ángel Montoro, cedido por el FC Barcelona al Fenix Tolouse HB por un año (le quedan cinco temporadas más como jugador del Barça), se toma su experiencia gala como una forma de mejorar, ya que él mismo dice que su etapa de formación aún no ha terminado.
En cuanto a su aclimatación a la escuadra francesa, y a expensas del aprendizaje del idioma, tiene todo a su favor, como es a media plantilla de sus excompañeros del Ademar León desperdigados en lo que ya es una de las ligas más fuertes, no en vano están recayendo en ella muchos jugadores españoles ya cuajados en contraste con los que se quedan en la Liga Asobal, más jóvenes, a la búsqueda de experiencia, tal y como observa el propio lateral internacional toledano.
Ángel Montoro se toma el año de cesión que va a jugar la próxima temporada en el Tolouse Handball como una forma de «explorar» su juego en busca de conocer «sus puntos fuertes». «Para luego probar cosas nuevas ya que me van a dejar libertad, hacer otras cosas y así coger más responsabilidad en los partidos», precisa algo más.
Hablamos con el gigantesco lateral de camino a Toledo, su tierra, antes de iniciar un viaje de vacaciones. Montoro, obviamente, no se esperaba la cesión del Barça, máxime cuando esta temporada no ha parado de «crecer» (deportivamente, claro, porque que lo haga aún más físicamente es imposible) al amparo sobre todo de sus meritorias actuaciones en la Selección.
Se toma la experiencia de forma muy positiva. «A veces hay que dar un paso atrás para tomar impulso… aunque no, esto no es un paso atrás, es una forma de ganar en minutos y responsabilidad», reflexiona.
Se va a Francia, donde realmente se está jugando «otra» liga española. Es más, sabe que muchos de los jugadores españoles consagrados están allí, mientras que en Asobal se quedan sobre todo los jóvenes valores hispanos.
De la francesa dice que es «una liga muy fuerte», donde ya hay más gente que conoce que en la liga española. En dicha liga están jugando buena parte de sus antiguos compañeros del Ademar León, los Antonio García, Rafa Baena, Adrien Dipanda, Felipe Borges y Iosu Goñi.
En Francia también está un excompañero de estudios de Montoro, Jaime González, que juega en un equipo de Cuarta División.
De su nuevo equipo, Montoro sabe que acabó décimo en la pasada campaña, pero al que sus refuerzos le otorgan crédito para aspirar «a dar la sorpresa metiéndose en Europa», aventura el toledano, quien constata que la «portería, antaño uno de sus puntos débiles, ha sido reforzada».
Destaca de su nuevo equipo a Jerome Fernández, internacional, y al central Maxim Gilbert.