El Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado hoy la puesta en marcha del primer proyecto piloto en España del transporte sensible a la demanda en la Serranía Alta-Alcarria de Cuenca como alternativa al modelo tradicional, que en estas zonas no funciona.
Según ha explicado el consejero de Fomento, Nacho Hernando, “el transporte sensible a la demanda es un transporte flexible y dinámico, sin horarios ni itinerarios fijos, que cubre las necesidades de desplazamiento en las horas que no son cubiertas por las líneas regulares, todo ello, a través de un vehículo compartido cuya capacidad se adapta a la demanda”. En este sentido, se primará coincidir con las zonas básicas de salud.
Horario, itinerario y tarifas
El horario e itinerario de las rutas se crea con escasas horas de antelación en función de la demanda de las usuarias y usuarios mediante una aplicación digital regida por un algoritmo de diseño y optimización de rutas, acompañado de un call center de apoyo.
El proyecto afecta a 72 municipios de la provincia de Cuenca, 124 núcleos poblacionales, una extensión de 4.917 kilómetros cuadrados y más de 15.500 personas. En cuanto a las tarifas, el usuario pagará 1,30 euros en desplazamiento de menos de 16 kilómetros y en más se pagará 0,08 euros por kilómetro adicional.
Transporte sensible a demanda
Para el consejero de Fomento la iniciativa supone “ponernos a la vanguardia en el transporte” ya que “en estas zonas el modelo de transporte tradicional no funciona y el transporte sensible a la demanda lo que viene es a corregir esa falta de igualdad de oportunidades en nuestro medio rural”.
“El transporte sensible a la demanda es algo que de forma muy pionera, de forma muy avanzada, muy vanguardista, está capitaneando Castilla-La Mancha en el conjunto de España. Tanto es así, que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha accedido a incluir el transporte sensible a la demanda en un nuevo pilar del transporte público en la futura ley del transporte a nivel nacional”, ha afirmado Hernando.
Stop a la despoblación: más de 200 medidas para vivir, con garantías, en los pueblos
Este proyecto se ampara en la Ley contra la Despoblación de Castilla-La Mancha y es el primero de seis que se incorporarán en 2022, entre ellos uno en Campo de Montiel.