Es una cuentista. Dicho así suena como muy… ¡Pues no! Lo es y de verdad. Pero de verdad de la buena. Escrito con sumo cariño, ¿eh? «Porque siempre me ha gustado escribir». De hecho, afirma que su sensibilidad es tan grande que en ocasiones sigue viendo la vida, en muchos casos, con los ojos de una niña.
¿Sabían que su gran pasión es el piano y que pudo dedicarse a él de forma profesional pero que la vida le llevó finalmente por otros derroteros? Pues sí, ahora podríamos estar hablando de Miss Ana López Casero, la pianista internacional que… Ella es la protagonista de nuestra Entrevista Irreverente de esta semana.
Pero al final, esta hija de político y pianista decidió que la farmacia, primero; y la comunicación después, iban a ser sus formas de vida. Directora general de la Fundación Horizonte XXII y directora de Comunicación y Relaciones Públicas de Globalcaja, sigue pensando que todavía faltan muchas más mujeres en los órganos de Gobierno de las empresas de las que hay y que la mejor forma de buscarse la vida en el caso de indigencia absoluta sería coger su piano, ponerse en cualquier plaza o calle y tocar a cambio de un plato de comida.
Una mujer con recursos, sin duda.
Afiliada al PP, entre sus personajes admirados se encuentran la Madre Teresa, Winston Churchill o Margaret Thatcher; su primer sueldo se lo gastó en un viaje a Ibiza con sus amigas y, por qué no, no le hubiera disgustado emular a Meryl Streep en su papel de la baronesa Von Blixen en la mítica «Memorias de África».
Entre sus travesuras destaca una que, como bien pueden imaginar, no ha vuelto a hacer: de pequeña cortó el pelo a sus tres hermanas porque pensaban que la vida era un juego y nada mejor que llevarlo a la práctica. Aunque no tuviera ni idea de utilizar la tijera y las dejara trasquiladas. Tal cual se lo cuento. Imaginen la que se montó cuando la madre llegó a casa y vio lo que había sucedido.
Lo recuerda con una amplia sonrisa esta ciudadrealeña de 44 años a la que le encanta bailar, estar con sus hijos (Gonzalo, Ana e Isabel) y su marido, su equipo, como ella misma los define; y a quien le gusta «retirarse» a sus aposentos cada día y aunque sea solo durante unos minutos «porque me gusta pensar, microespacios de tiempo, como yo los llamo, en los que me regaño a mí misma muchísimo porque soy muy exigente conmigo mismo».
¿Qué están esperando, que hablemos del tamaño? Ja, ja, ja… Mucho me temo que van a esperar a mañana, cuando publiquemos en encastillalamancha.es y de forma íntegra el resultado de esta Entrevista Irreverente.
Sí les digo una cosa, y es que hablando del juego del parchís lo tuvo claro: «Las mujeres somos más discretas que los hombres, ¿eh?». ¿Y para el sexo? «Yo soy…».
Catapún chimpún. Ahí se lo dejamos. Mañana más.