viernes, 19 de abril de 2024
26/12/2011junio 14th, 2017
Enclm Enclm

El periodista Ángel Alonso, experto de EFE en cuestiones del PP, eligió el día de Navidad para desvelar una de las incógnitas que quedaban sobre cómo se iba a cerrar el reparto del poder en el PP tras las victoria de las generales y la llegada al Gobierno de España. La respuesta a la pregunta: ¿Qué pasará con María Dolores de Cospedal? es que se queda con Génova; es decir, se mantendrá en la Secretaría General del partido otro mandato más, que revalidará en el Congreso Nacional del PP en Sevilla a mediados de febrero.

En Toledo se contaba con ello, pero tanto desde el PSOE castellano-manchego como desde otras baronías «populares» se había empezado a hablar claramente de la pérdida de influencia de Cospedal en la nueva era «popular», justo cuando esta organización acumula más poder.


La noticia, muy oportuna para atajar el cuestionamiento de su poderío político (indiscutible hasta la fecha en el seno del Partido Popular), a mí, además, me parece positiva para los intereses de Castilla-La Mancha. Por un lado, Cospedal mantendrá su influencia, pero perderá protagonismo y agenda nacional, dos cosas que al Gobierno de Castilla-La Mancha, en particular; y a la comunidad autónoma, en general, le vendrán muy bien.

A la presidenta regional le va a hacer falta tirar de toda su autoridad para convertir cada cartera del Gobierno de Mariano Rajoy en una aliada para esta comunidad. También serán de gran ayuda sus relaciones con todos los que pintan en el país, un estatus que mantiene quedándose como número dos del partido que Gobierna el Estado y la mayoría de sus comunidades autónomas.

Necesitamos de todo y de todos para salir adelante. Somos una tierra maniatada por una deuda gigante para los tiempos y un plan de ajustes y recortes que ha generado muchísima preocupación por la paralización de la actividad económica que puede suponer en una autonomía tan dependiente del movimiento del dinero público.

La influencia y la cercanía a Rajoy harán mucha falta a Cospedal cuando pida al presidente, es previsible que lo haga, alguna medida de gracia para que el llamado Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos permita hacer más cosas que parar la máquina y mantener la respiración.

También considero positivo que Cospedal baje su protagonismo y su agenda. Lo primero, nos ahorrará enemigos y disparos exteriores. Lo segundo, permitirá incrementar la presión sobre su Gobierno, que no vendrá nada mal. En un Ejecutivo que gobierna por primera vez una comunidad autónoma, con un buen número de consejeros foráneos que debutan en el conocimiento de los problemas típicamente castellano-manchegos y que no tiene vicepresidente, la presencia full time de Cospedal es imprescindible.

Se nota cuando no está o cuando su actividad nacional crece en intensidad. Eso lo dice todo el mundo, dentro y fuera del Gobierno. Su dirección es imprescindible para que no se pierda ni un minuto más en esta tierra que ha entrado en la Unidad de Cuidados Intensivos y en la que cualquier despiste puede ocasionar daños irreversibles en décadas.

Una buena noticia para terminar el año. Buena falta nos hacen.

(Visited 14 times, 1 visits today)