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jueves, 18 de abril de 2024
Crea la Oficina del Español y le pone al frente con 75.000 euros de sueldo al año - 02 julio 2021 - Madrid
Agustín Yanel Agustín Yanel

A la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se le ha ocurrido crear una Oficina del Español y ha colocado como director a Toni Cantó, exdiputado de UPyD y de Ciudadanos ahora en las filas del PP. Cuando él era diputado en las Cortes Valencianas acusó al presidente socialista Ximo Puig de crear oficinas para «colocar amiguetes», pero ahora no ha tenido inconveniente de aceptar ese puesto, muy agradecido, por el que cobrará 75.000 euros al año. Son cosas de la política o, mejor dicho, de algunos políticos que, por lo que se ve, quieren vivir de ella aunque digan lo contrario.

Esta iniciativa, que Díaz Ayuso había planeado hace tiempo, ha provocado un aluvión de críticas. Porque, ¿acaso el idioma español está en peligro en Madrid o se habla poco, y hay que promocionarlo y defenderlo en ese territorio?; ¿una comunidad autónoma puede erigirse en la defensora de la lengua oficial de España?; ¿Madrid va a competir en esa tarea con el prestigioso Instituto Cervantes, una institución pública creada hace 30 años y dirigida por el poeta Luis García Montero, Premio Nacional de Literatura, que tiene centros en 88 ciudades de 45 países?


Dispuesta a salvar a España, al idioma y a lo que le pongan, desde Madrid

La presidenta madrileña y su Gobierno han dicho que, con esta Oficina del Español, quieren convertir a Madrid en la capital europea del español y fomentar la industria y el potencial económico y cultural de la región. Hace tiempo que ella ya actúa como si fuera la defensora de la unidad de España frente al independentismo catalán y el muro de contención frente a lo que considera un mal, malísimo Gobierno de Pedro Sánchez. Ahora, tras su éxito en las últimas elecciones autonómicas, parece que también se considera capaz de salvar el idioma español -aunque no se sabe qué peligros corre en Madrid- y a todo lo que le pongan por delante, desde la Presidencia de una de las 17 comunidades autónomas del Estado español.

Toni Cantó, en respuesta a las muchas críticas que ha recibido por la incoherencia que supone haber sido tan crítico y ahora aceptar ese cargo, ha intentado justificar lo que es injustificable. Ha dicho que la polémica oficina no es un chiringuito, porque no cuenta con personal a su cargo sino que está él solo. ¿Y así, sin más medios, va a conseguir todo lo que pretende la presidenta con su iniciativa? En fin…

Que no lo llamen chiringuito, si no quieren. Pero sí es una sustanciosa beca Ayuso que ha recaído en Toni Cantó por decisión de la presidenta, ¿o de Pablo Casado, que fue quien decidió que él fuera en la candidatura madrileña, aunque al final no pudo ser? Así, después de su último cambio de partido político, y de haber dicho al abandonar Ciudadanos que iba a llamar a su representante para que le buscara trabajo en su profesión de actor, ya tiene un cargo bien remunerado sin necesidad de acudir a unas elecciones ni de protagonizar un papel en el cine, la televisión o el teatro.

Los vaivenes políticos de Toni Cantó

Conviene recordar los cambios de partido y de comunidad autónoma que ha protagonizado Toni Cantó desde que decidió participar en la política activa, ejerciendo ese derecho constitucional como cualquier ciudadano. En 2006 se afilió a Ciudadanos, pero al año siguiente se presentó a las elecciones municipales por la agrupación Vecinos por Torrelodones (Madrid), donde residía, y no salió elegido. Un año después se pasó a Unión, Progreso y Democracia (UPyD), el partido que lideraba Rosa Díez, y fue diputado por esta formación.

En 2015, cuando en el congreso de UPyD perdió la candidatura en la que él iba de número dos frente a la de Rosa Díez, abandonó ese partido y su escaño y volvió a afiliarse a Ciudadanos. Entre 2019 y 2021 fue el portavoz del partido naranja en las Cortes Valencianas, hasta que el 15 de marzo de 2021 se marchó de la reunión de la Junta Ejecutiva de Ciudadanos y anunció a los periodistas que dejaba su escaño en Valencia, el partido y la política. Fue entonces cuando dijo que pediría a su representante que le buscara trabajo de actor.

Pero nada más lejos de la realidad que esas declaraciones. Tres días después de decir que dejaba la política para volver a su profesión de actor, la dirección nacional del PP anunció que Toni Cantó iría en la candidatura de Isabel Díaz Ayuso a la Asamblea de Madrid. Finalmente un juez sentenció que no podía ser candidato, porque se había empadronado en Madrid solo un mes antes y la ley no lo permite, pero participó en la campaña electoral y se deshizo en elogios hacia la presidenta cada vez que habló en un mitin o en un medio de comunicación. Ahora ha sido recompensado con un trabajo bien remunerado; y no es de actor.

Toni Cantó ha sido objeto de muchas críticas y burlas en Twitter, porque escribió un breve mensaje para agradecer a la presidenta su nuevo cargo y en él faltan dos comas y sobran otras dos, una de ellas en la frase «Madrid, lo hará» (sic). Quizá le convendría hacer un cursillo urgente de ortografía del idioma que, según Díaz Ayuso, va a convertir a Madrid en la capital europea del español. Y, de paso, a partir de ahora que frene sus ímpetus por lanzar tuits, una práctica que le ha hecho protagonizar numerosas polémicas y le han obligado a pedir disculpas varias veces.

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