El PSOE de Castilla-La Mancha ha afirmado hoy que la petición de 848 millones del Gobierno regional al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) habilitado por el Ejecutivo nacional es «una intervención de facto» por parte del Ministerio de Economía.
Así se ha manifestado hoy en conferencia de prensa la portavoz del PSOE en Castilla-La Mancha, Cristina Maestre, que ha criticado la forma en que la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, anunció ayer públicamente la solicitud de liquidez por parte de la comunidad autónoma, «en un contexto distendido», como la toma de posesión del presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.
«El contexto y la puesta en escena fue lamentable», ha denunciado Maestre, que ha insistido en que ayer «Castilla-La Mancha fue rescatada, no hay que entrar en eufemismos ni en la negación de la realidad».
Incluso ha considerado que fue una «falta de respeto» la actitud de Cospedal al realizar el anuncio, porque «parecía estar muy a gusto», pero ha considerado que «sobró la alegría, porque la situación es muy complicada» para la región.
A su juicio, la petición de liquidez al Ejecutivo central «constata la gran mentira del Gobierno de Cospedal» y ha instado a la presidenta a que «con tranquilidad y determinación, cuente lo que está ocurriendo de verdad» pues ha insistido en que se trata de una intervención de la comunidad autónoma, una afirmación que «no es una opinión», sino que ha dicho que se basa en el documento en el que se detallan las condiciones del FLA.
Según Maestre, este documento recoge que en quince días, la comunidad debe abordar con Hacienda nuevas medidas del restricción del gasto en materia educativa, sanitaria, de gasto corriente y recursos humanos, lo que se traducirá en «más recortes», con lo que ha contradicho al consejero de Hacienda, Arturo Romaní, que ayer sostuvo que no harían falta nuevas medidas, sino actualizar el plan de equilibrio financiero.
«Eso es otro eufemismo, porque el plan de ajuste, que ya era fuerte, tendrá que ser revisado e incluir más recortes», ha alertado la portavoz socialista, que ha subrayado que la petición de liquidez conlleva el «cumplimiento estricto» de las medidas de ahorro aprobadas por el Gobierno central.
Ha añadido que el Ministerio de Economía realizará un seguimiento y control permanente de los ajustes adoptados por la comunidad y sus resultados, de forma que si el Gobierno regional «no aplica las medidas de recortes, se procedería a la intervención inmediata del Estado».
«Es una intervención en toda regla, por mucha risa que le dé a Cospedal», ha espetado Maestre.
Ha criticado también el destino del dinero solicitado, pues ha afirmado que se puede reservar una parte para pagar deuda con las universidades o con las administraciones locales, pero «Cospedal dijo con desparpajo que todo el dinero será para los bancos».
En este sentido, ha aseverado que, a pesar de la deuda financiera de la comunidad, el 80 por ciento vence a largo plazo e incluso ha dicho que el nivel de endeudamiento de Castilla-La Mancha «no es el peor de España», sino que Galicia, Valencia, Madrid o Cataluña lo superan.
A su entender, el problema viene por una falta de liquidez, agravada por «una caída brutal de los ingresos» que son consecuencia, según Maestre, de las políticas de ajuste.
Por ello, la propuesta de los socialistas para mejorar la situación financiera de la región pasa por que sean las grandes rentas las que «paguen la crisis» con un aumento de los impuestos y que se persiga el fraude fiscal.