Con la introducción de seis pollos en un nido artificial instalado en el Alcázar de Toledo, la Dirección Provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha puesto en marcha un proyecto de cría en cautividad y reintroducción del halcón peregrino, siendo su principal objetivo el establecimiento de parejas reproductoras en edificios históricos de la ciudad.
Uno de los ejemplares que participan en el proyecto.
El halcón peregrino (falco peregrinus) es una especie incluida en el catálogo regional de especies amenazadas de Castilla-La Mancha, en la categoría de «vulnerable», lo que significa que si no se corrigen los factores adversos que actúan sobre ella corre el riesgo de pasar a otras categorías de protección, como en peligro de extinción.
El delegado de la Junta en Toledo, Javier Nicolás, ha subrayado que este proyecto tiene como objetivo incrementar la población del halcón peregrino en la provincia, que se encuentra muy mermada en comparación con las ocupaciones históricas, que abarcaban prácticamente la totalidad del Valle del Tajo. Ha añadido que «este proyecto impulsado por la Dirección Provincial se enmarca dentro de los mandatos establecidos por la Ley de Conservación de la Naturaleza de Castilla-La Mancha, que determina que las administraciones deben velar por la conservación de las poblaciones y la restauración de los niveles poblacionales».
Según informa la Junta en nota de prensa, el responsable del Gobierno regional ha explicado que el objetivo principal del proyecto consiste en el establecimiento de parejas reproductoras en edificios históricos de Toledo, lo que» contribuirá también a reducir las poblaciones de paloma torrera que tan importantes perjuicios causa al patrimonio histórico de la ciudad».
En este sentido, Javier Nicolás ha agradecido a los responsables del Museo del Ejército su colaboración y su autorización para sacar adelante este proyecto, al permitir la instalación en sus dependencias de las jaulas y plataformas necesarias. «Sin vuestra colaboración e implicación en este proyecto, ya que precisa de edificios con altura, la puesta en marcha de esta novedosa actuación en Toledo no hubiese sido posible».
Asimismo, Nicolás indicó que desde la Dirección Provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural se está también en conversaciones con el Arzobispado para que a este proyecto se pueda incorporar en la Catedral de Toledo el próximo año.
Por su parte, el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, José Manuel Martín Aparicio, ha señalado que con este proyecto se busca también que exista a futuro una población de reproductores que incrementen la población natural de halcones, ya «que esperamos que los nuevos ejemplares puedan encontrar nichos naturales en los que instalarse».
«Además estas actuaciones servirán de experiencia para futuras actividades de reintroducción de halcones peregrinos en el medio natural, como por ejemplo los cortados del Tajo, donde prácticamente ha desaparecido una población que no hace mucho estaba bien asentada», señaló Martín Aparicio, quien añadió que «con esta experiencia también queremos contribuir a la educación y sensibilización ambiental».
Este proyecto, que está diseñado para que se desarrolle en tres años, es una novedad en la capital toledana, aunque ya existen actuaciones similares y que están dando buenos frutos en otras ciudades, como en la Catedral de Bruselas, que lleva funcionando desde 2004, o en el edificio Torre Europa, en Madrid.
El proyecto se ha iniciado hoy con la reintroducción de cinco halcones (cuatro pollos y un adulto) procedentes del Centro de Estudios de Rapaces Ibéricas (CERI) de Sevilleja de la Jara en el nido instalado en el Alcázar de Toledo. En el CERI se realizan los trabajos previos necesarios para la preparación, obtención y fertilización de huevos, así como la cría de los pollos hasta la edad en que son trasladados a las jaulas de cría, en los edificios seleccionados.
Estos pollos, una vez ubicados en el edificio, tendrán un marcaje GPS de forma que se puedan conocer sus movimientos y, en su caso, causas de mortalidad. También se han instalado varias cámaras IP conectadas a una página web, con visión en tiempo real de la cría.
A los seis pollos que se van a reintroducir este año en el Alcázar, está previsto sumar otros 10 pollos en 2017 y otros 10 más en 2018. En estos años, al Museo del Ejército se pretende la instalación de nidos en la Catedral toledana, un asunto que está en conversaciones con el Arzobispado, que ha expresado verbalmente muy buena disposición.
Según han explicado técnicos de la Dirección Provincial, la mortalidad natural de las crías de halcón peregrino está alrededor del 60 por 100, por lo que es necesario que se libere un buen número de individuos para lograr que se establezcan varias parejas.