La Plataforma contra el Cementerio Nuclear en Cuenca denuncia que es la tercera adjudicación directa de Enresa en relación con el ATC, es decir, sin someterse al trámite de oferta pública. Ahora destacan que se trata de una cuantía muy superior. La Plataforma y el Movimiento Ibérico Antinuclear (MIA) se concentrarán para protestar frente a la sede de Enresa el 28 de marzo.
Desde la Plataforma destacan que «la empresa pública además de seguir adjudicando contratos, prevé incorporar a 40 nuevos empleados, a pesar de que el proyecto está paralizado por una ley autonómica desde julio de 2015 y sin ninguno de los 4 permisos pertinentes, ni planeamiento urbanístico».
La Plataforma ya denunció públicamente hace ahora un mes la adjudicación de nuevos contratos relacionados con el ATC. Pero en aquella ocasión, el importe fue de 46.595,29 euros y 49.761,25 euros a los que hay que sumar otro contrato posterior por valor de 21.780,00 euros. De estos contratos, el primero y el tercero, también fueron adjudicado de forma directa.
Pero en esta ocasión, «se trata de una licitación por un importe muy superior. Son trabajos de caracterización de los terrenos para el ATC complementarios a los que se están realizado en la actualidad, en cumplimiento de la ITC (Instrucción técnica complementaria) del informe para la autorización previa o de construcción emitida por el CSN en julio del año pasado. Esta licitación se ha adjudicado por un valor de 347.027,81 euros (IVA incluido). La adjudicación lo es al mismo grupo de empresas constituidas en una UTE que actualmente se encuentran realizado sondeos de 200 metros en los terrenos designados para construir el ATC».
Según María Andrés, portavoz de la Plataforma y ganadera de Villares del Saz: «Nuestros abogados están estudiando la legalidad de estos contrataciones, pero en todo caso la inmoralidad de estos hechos no tiene duda: por un lado porque la obra está legalmente parada y por otro porque una empresa pública debería ser absolutamente escrupulosa en la adjudicación de dinero público y (en este caso) ni siquiera se han guardado las formas. Por eso el 28 iremos a la sede de Enresa para que pare de una vez el derroche de dinero público en el ATC. También deberían parar los intentos de un gobierno en funciones en sacar con todo tipo de marrullerías un cementerio nuclear paralizado por ley. El actual presidente de Enresa (Juan José Zaballa) se permite el lujo de adjudicar licitaciones a dedo. Cosa que no hizo el anterior presidente de Enresa (Gil-Ortega) que, sin embargo, tuvo que dimitir por irregularidades en la licitación de la obra del edificio principal del ATC».