Agentes de la Policía Nacional de Toledo han imputado desde el pasado mes de junio a dieciséis personas por simulación de delitos, en su mayoría falsos robos.
Según ha informado en nota de prensa la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, este tipo de denuncias cada vez proliferan más, en muchas ocasiones para obtener una compensación por parte de los seguros, lo que también constituye una estafa, o para ocultar a la pareja el extravío de algún objeto o un gasto injustificado.
De hecho, el incremento constante de denuncias falsas ha hecho que la Comisaría de Policía Nacional de Toledo haya creado un grupo de funcionarios especializados dedicados a la investigación de estos hechos delictivos.
Los agentes revisan las denuncias que, diariamente, se interponen y realizan las gestiones pertinentes para la comprobación de los hechos, a fin de llegar al esclarecimiento y averiguación de todas las circunstancias que rodean estas infracciones penales.
La simulación de delito -que conlleva un retraso en la acción de la justicia y un «serio menoscabo» de los servicios policiales- está castigada con penas de multa de seis a doce meses.
Las personas que incurren en estas simulaciones de delito son detenidas, pasan por calabozos y se procede a su reseña policial, es decir, toma de fotos y huellas dactilares, ha advertido la Delegación del Gobierno.
Tras prestar declaración, son puestas en libertad con cargos y citadas para la celebración de un juicio rápido en los días posteriores.
Como ejemplo del aumento de estos delitos, la Delegación del Gobierno ha señalado que sólo durante el fin de semana pasado se demostró la falsedad de cuatro denuncias en las que los presuntos perjudicados afirmaban haber sido objeto de diferentes robos con violencia e incluso una de las denunciantes se autolesionó para dar mayor sensación de credibilidad y veracidad a su relato.