La Policía Nacional ha detenido en Talavera de la Reina (Toledo) a dos hombres, de 41 y 44 años, como presuntos responsables de un delito de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico, y ha intervenido cerca de 1.000 plantas de marihuana repartidas en dos viviendas.
En nota de prensa de este viernes, la policía ha detallado que la operación «Higuera» arranchó a principios del mes de marzo, cuando los investigadores obtuvieron indicios de que dos inmuebles de Talavera, muy próximos entre sí, podrían estar ocultando plantaciones «indoor» de cannabis.
Uno era el «jardinero» y el otro el administrador
Una vez iniciada la investigación, se comprobó que había un hombre que dormía en uno de esos inmuebles y que visitaba el otro de forma diaria; y que otro varón, con antecedentes por tráfico de drogas, permanecía un tiempo en el interior de las viviendas y que después regresaba a su propio domicilio.
Las investigaciones de la Policía Nacional permitieron corroborar que el individuo que pernoctaba era el «jardinero», encargado del cuidado, la custodia y vigilancia de la sustancia estupefaciente, mientras que el otro era el propietario y principal responsable de la actividad ilícita.
Casi 1.000 plantas repartidas en dos viviendas
En el registro de las viviendas se aprehendieron cerca de 1.000 plantas de marihuana -451 en uno de los inmuebles y 498 en el otro- así como lámparas, aparatos de aire acondicionado y humidificadores que mantenían las condiciones óptimas para lograr el máximo crecimiento de las plantas.
Ambos detenidos han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.