La Guardia Civil mediante la Operación Volvone ha conseguido detener a 11 personas e investigar a una más por la comisión de varios robos con violencia e intimidación; estos robos se producían principalmente en lugares aislados o con poca visibilidad a altas horas de la madrugada y se caracterizaban por ser especialmente violentos, ya que empleaban armas blancas que no dudaban en usar para sustraer los efectos que portaban las víctimas, como dinero en metálico, tarjetas bancarías y teléfonos.
11 personas detenidas en Tomelloso por robos
Desde el inicio de la investigación se verificó que se trataba de varios grupos de personas que actuaban por separado por lo que la explotación de la operación se realizó en varias fases.
En la primera fase, que comenzó el 27 de julio, detuvieron a cuatro personas tras robar con violencia a varias víctimas cuando abandonaban uno de los locales de alterne de esta localidad, abordándolos para ello con armas blancas llegando a producir lesiones leves a alguna de ellas. Les sustrajeron tanto dinero en efectivo, como teléfonos móviles y tarjetas bancarias, usándolas con posterioridad para llevar a cabo pagos fraudulentos.

Los ladrones usaban armas blancas como esta.
Segunda fase
En la segunda fase se detuvo a dos personas en Argamasilla de Alba tras abordar con arma blanca a una persona sin techo que se encontraba durmiendo en un parque de la localidad de Tomelloso, llegando a producirle lesiones y robándole todas sus pertenencias, que fueron parcialmente recuperadas.
En la tercera fase se detuvo a una persona tras el robo con violencia de varios efectos en un supermercado.
En la cuarta fase, se detuvo a dos personas e investigó a otra por delitos de robo, lesiones y amenazas con arma blanca, tras sustraer un teléfono móvil de alta gama en un 24 horas.
Por último, detuvieron a otras dos personas como presuntas autoras de un robo con violencia e intimidación, en el que los autores abordan a la víctima durante la madrugada en una zona poco transitada y tras agredirle violentamente le sustrajeron el teléfono y 200 euros en metálico.