La Diputación de Toledo asegura que no dispone ni de financiación ni de atribuciones para asumir competencias que no le corresponden, como sería el caso de las relacionadas con los servicios sociales, por lo que se ha mostrado dispuesta a ceder a la Junta de Comunidades «sin ningún tipo de problema» el edificio de San Juan de Dios de la capital para que el Gobierno regional desarrolle una residencia.
Así lo ha señalado la portavoz de la Diputación de Toledo, Soledad de Frutos, a preguntas de los medios durante la romería del Valle, después de que el Ejecutivo castellanomanchego haya señalado que no tiene intención de promover la construcción de una residencia de mayores en dicho edificio –propiedad de la Diputación– tras la moción aprobada por el pleno del Ayuntamiento de Toledo instando a la Consejería de Bienestar Social a que comunicase su compromiso para poner en marcha esta iniciativa.
«Encantados» de ceder el edificio si la Junta quiere construir residencia
Soledad de Frutos ha remarcado que cada administración tiene competencias claramente definidas, y que la Diputación no dispone ni de financiación ni de atribuciones para asumir competencias que no le corresponden, como sería el caso de las relacionadas con los servicios sociales, «más allá de apoyar a los municipios».
Pero estarían «encantados», ha dicho, de que «si tiene interés la Junta, que sí tiene competencias, pues ceder sin ningún tipo de problema al edificio y que ellos desarrollen una residencia o aquel otro uso que quieran dar».
«Nosotros estamos dispuestos a apoyar al Ayuntamiento de Toledo en todo aquello que sea necesario, pero también es claro que las administraciones tenemos unas competencias y esas competencias las tenemos que respetar, porque para eso también tenemos una financiación adecuada para ejercer las competencias que tenemos cada uno».
La portavoz ha reafirmado el compromiso de la Institución provincial con la recuperación del edificio de San Juan de Dios, dentro del proyecto ‘Toledo Emerge’ del Ayuntamiento, señalando que el uso planteado «se puede ampliar, no es incompatible con ningún otro, y estamos dispuestos a apoyar al Ayuntamiento en todo lo que sea necesario».
«El edificio de San Juan de Dios está declarado Bien de Interés Cultural y, como administración responsable, nuestro deber es facilitar que estos inmuebles tengan un desarrollo y un uso adecuado», ha señalado, asumiendo que no se pueden permitir «que un bien tan importante siga cerrado y sin vida. Lamentablemente, eso es lo que ha ocurrido durante muchos años: se cerró la residencia, no se le dio ningún uso y el edificio ha permanecido abandonado. Esa situación no puede prolongarse más».