La sostenibilidad energética pasa por mejorar la eficiencia, un proceso que conlleva importantes beneficios para el tejido empresarial y en el que BBVA puede acompañar. ENCLM entrevista sobre esta cuestión a Germán Sánchez, Gestor de Financiación Sostenible de BBVA en Castilla-La Mancha.
Cada vez se habla más de sostenibilidad, pero ¿qué significa realmente en el día a día de una pyme?
Significa gestionar mejor los recursos, anticiparse a los cambios normativos y responder a lo que el mercado demanda. Las empresas que integran la sostenibilidad en su modelo de negocio no solo reducen costes, sino que también ganan reputación y abren la puerta a nuevas oportunidades de crecimiento.
¿Qué ha cambiado en los últimos años para que la eficiencia energética cobre tanto protagonismo?
La volatilidad del precio de la energía ha sido un detonante. Muchas empresas se dieron cuenta de que no podían depender exclusivamente de los costes del mercado y comenzaron a analizar cómo y cuánto consumían. Esa reflexión ha dado lugar a una transformación más profunda, donde la eficiencia se ve como una inversión estratégica.
«Empezar pronto marca la diferencia»
¿Dónde están las mayores oportunidades para las empresas manchegas?
En sectores como la industria agroalimentaria, la logística o la fabricación, la eficiencia energética ofrece márgenes de mejora muy amplios. Desde el autoconsumo fotovoltaico hasta la optimización de sistemas térmicos o de refrigeración, hay soluciones adaptables a cada tipo de negocio. Además, la región tiene un gran potencial para aprovechar energías renovables.
¿Cómo puede BBVA facilitar este proceso de cambio?
Nuestra labor es acompañar a las empresas en todas las fases. Les ayudamos a identificar proyectos viables, a acceder a financiación verde y a aprovechar las subvenciones disponibles. Contamos con soluciones digitales para evaluar el impacto energético y financiero de cada iniciativa, lo que permite tomar decisiones más seguras y eficientes.
Hay empresas que aún no han dado el paso. ¿Qué les diría?
Que empezar pronto marca la diferencia. La transición energética no solo mejora la eficiencia, también refuerza la resiliencia y el valor de la empresa. Es una oportunidad para modernizarse, ganar competitividad y contribuir a un modelo económico más sostenible. En BBVA queremos ser su socio en ese proceso.
«En sectores como la industria agroalimentaria, la logística o la fabricación, la eficiencia energética ofrece márgenes de mejora muy amplios»
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