El Tribunal Constitucional (TC) ha desestimado el recurso de inconstitucionalidad interpuesto por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha contra el criterio de reparto del impuesto a la banca de acuerdo con el producto interior bruto (PIB), establecido en la Ley 7/2024, de 20 de diciembre.
Según ha informado el Tribunal Constitucional en una nota de prensa, el pleno ha desestimado por unanimidad dicho recurso, interpuesto contra el apartado 21 de la disposición final novena de la mencionada ley, por la que se establece un impuesto complementario para garantizar un nivel mínimo global de imposición para los grupos multinacionales y los grupos nacionales de gran magnitud, un impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de determinadas entidades financieras y un impuesto sobre los líquidos para cigarrillos electrónicos y otros productos relacionados con el tabaco.
En su fundamentación, la sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado César Tolosa Tribiño, aplica la doctrina que aborda diversas impugnaciones relacionadas con la falta de participación autonómica en el reparto de los ingresos del nuevo tributo, el impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de determinadas entidades financieras (IMIC) y el uso del producto interior bruto (PIB) regional como criterio de distribución.
Asimismo, el tribunal ha desestimado las impugnaciones relacionadas con el principio de solidaridad y la autonomía financiera.
El impuesto no forma parte del sistema de financiación autonómica
Por otra parte, la sentencia sostiene que el IMIC no forma parte del sistema de financiación autonómica, lo que exonera al Estado de la obligación de consultar a las comunidades en el reparto de la recaudación a través del Consejo de Política Fiscal y Financiera.
El pleno también ha desestimado la impugnación referente a la falta de homogeneidad en la transacción a una de las enmiendas presentadas y ha indicado que el criterio de reparto tiene «una conexión material con el objetivo del proyecto de ley».
En este sentido, ha resuelto que la distribución de los fondos no requiere la intervención de una ley orgánica, dado que el tributo no ha sido cedido a las comunidades autónomas.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha criticado el impuesto a la banca en varias ocasiones por considerarlo regresivo y desigual con los territorios.