La consejera de Desarrollo Sostenible del Gobierno de Castilla-La Mancha, Mercedes Gómez, ha desembarcado en Madrid para asistir a la reunión del Consejo Nacional del Agua, donde preguntará a la ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen, por la puesta en marcha de las nuevas normas del trasvase Tajo-Segura, que se retrasan desde febrero de 2024.
«Que la pregunta conste en acta»
En declaraciones a los medios, antes de participar en la reunión, ha dicho que elevará esta cuestión «para que conste en acta», recordando que este Consejo del Agua tendría que haber abordado ya la modificación de las reglas de explotación «para adaptarlas a lo que dicen los propios planes que se aprueban y acomodarlas a las diferentes sentencias de los últimos tiempos».
En estos momentos, después de varias aportaciones técnicas que ha realizado el Gobierno de Castilla-La Mancha para demostrar que esta infraestructura se puede gestionar «de una forma sostenible», la situación según Gómez es que las nuevas reglas «ni están, ni se les esperan».
«No vamos a aguantar más»
«Seguimos sin entender qué es lo que pretende hacer el Ministerio o si quiere agotar el tiempo y esperar al 2027 con la nueva planificación», se ha cuestionado Gómez, quien asegura que a principios de año el Gobierno de Castilla-La Mancha «tomará las medidas que estime convenientes y que Emiliano García-Page pida». «No vamos a aguantar más»:
Las medidas a adoptar pasan por «reclamar a los tribunales que se cumplan las sentencias» y un Real Decreto que «ha escrito el propio Estado».
«Tienen la capacidad y la potestad para poderlo hacer y de hecho ya lo podrían haber hecho si hubiesen querido. Tienen informes técnicos encima de la mesa que avalan que hay que hacer esos cambios», ha zanjado.
La Agencia del Agua se integrará en Desarrollo Sostenible
Por otro lado, Mercedes Gómez, ha precisado el anuncio realizado esta semana por el presidente regional, Emiliano García-Page, apuntando que la entidad pública Agencia del Agua de la región se integrará en el organigrama de su departamento, de forma que la propia consejera será quien dirija y controle toda la política de agua de la comunidad autónoma.
En declaraciones a los medios desde Madrid, ha explicado que eso conllevará un «cambio de estructura en la propia Consejería» de cara a crear una Dirección General ‘ad hoc’ «que va a acompañar técnicamente todas las necesidades» de cara al cuarto ciclo de planificación.
«Se va a reforzar nuestra entidad de derecho público, Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, para que tenga más capacidad todavía en materia de gestión y de implementación de esas infraestructuras hidráulicas que necesitamos y que además demandamos en ese cuarto ciclo» ha indicado.