La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha asegurado que el nuevo colector del Aserradero es «una infraestructura muy necesaria» para la ciudad, que solucionará un problema «de décadas».
En declaraciones a los periodistas tras visitar el inicio de las obras, la alcaldesa, se ha felicitado de que «por fin» hayan comenzado unas obras consecuencia «del buen hacer de diferentes administraciones».
El colector del arroyo del Aserradoro canalizará las aguas residuales de las localidades de Olias del Rey, Bargas y parte de la ciudad de Toledo.
Con una longitud de 4,5 kilómetros, el colector termina a la entrada de Toledo desde donde se canalizarán las aguas residuales a la nueva depuradora de la ciudad.
La concejala de Servicios Públicos, Noelia de la Cruz, concejal de Obras, ha explicado que el objetivo de las obras es disponer de un nuevo colector «con capacidad suficiente» y solucionar «los problemas de insalubridad y malos olores que padece una de las principales entradas» de Toledo.
En este sentido, el presidente de la Asociación de Vecinos San Antón, Tomás Ruiz, ha mostrado su satisfacción de que «después de muchos años sufriendo las consecuencias», hayan comenzado las obras del nuevo colector.
La alcaldesa también ha valorado la importancia de la obra para solucionar el problema de «los vertidos incontrolados al río», algo que ha calificado de «fundamental» para mejorar «la protección del medio ambiente».
El Ayuntamiento de Toledo recepcionó la obra a principios del mes de junio y la concejala espera que «en la primavera del año que viene» esté terminada ya que el plazo de ejecución tiene una horquilla de 10 a 12 meses.
El proyecto tiene un presupuesto de 2,4 millones de euros que aportarán a partes iguales los ayuntamientos de Toledo, Bargas y Olías del Rey.