Nóminas, gastos financieros, bienes corrientes, transferencias corrientes, inversiones reales… Tras todos esos pagos la tesorería ha sido negativa por más de 100 millones de euros y la Junta de Castilla-La Mancha ha tenido que disponer de pólizas de crédito.
El consejero de Economía y Hacienda, Diego Valle, demostró en las Cortes regionales que la Junta de Castilla-La Mancha paga nóminas y gastos financieros, pero también ha realizado otra serie de pagos como: bienes corrientes, 127 millones; transferencias corrientes, 230 millones; inversiones reales, seis millones; y transferencias de capital, 64 millones.
Valle explicó que, de la diferencia de cobros y pagos presupuestarios, el saldo resultante ha sido de 75 millones de euros. Pero además, según indicó el consejero, hay que añadir los pagos extrapresupuestarios.
Entre otros, han sido 148 millones de pago de deuda a corto plazo y 28 millones de euros de ejercicios cerrados. Además, está la Seguridad Social y los pagos de IRPF, cajas pagadoras, etcétera. «Después de todos estos pagos, la tesorería ha sido negativa por más de 100 millones de euros, y se ha tenido que disponer de pólizas de crédito».
Valle recordó en las Cortes regionales que «los presupuestos tienen siete capítulos y no dos como creen ustedes», refiriéndose a los diputados socialistas. Y aclaró que es «completamente falso» que durante los meses de julio a septiembre hubiera un excedente de 500 millones de euros en la ejecución presupuestaria, sino que se ha excedido en más de 100 millones los pagos efectuados respecto a los ingresos recibidos.