Un trabajo muy duro pero, a la vez, gratificante. Aun así, no pude convencer a la protagonista de la Entrevista Irreverente de esta semana para que ella, a su vez, me convenciera a mí en el caso de que hubiera una pequeña posibilidad de hacerme agricultor o ganadero. ¡Con la que está cayendo!
Bien, pues así es Blanca Corroto, presidenta de la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Toledo, una mujer con dotes de mando en un mundo que, por lo general, al menos en la primera línea, siempre ha sido de hombres.
Y ahí está. Ella no ha vendimiado pero sí se pegó unas buenas panzadas de coger aceitunas. Y, hete ahí, su marido dejó de ser funcionario en Madrid… ¡Para venirse al campo y casi ponerse de sol a sol! Sí, sí… Nos lo cuenta en la Irreverente, cuya entrevista, íntegra, la podrán leer mañana jueves en encastillalamancha.es. Ahora les dejamos este pequeño adelanto en forma de aperitivo.
Llegó a ser pastora por un día porque su padre tenía otros compromisos y… ¡Ufff…! Ahí lo dejo. ¡Las ovejas no le hacían ni caso! «Corrimos detrás de ellas (habla en plural porque ya estaba por allí su entonces novio y ahora marido) lo que no está escrito, se puso una oveja de parto y… ¡No sabíamos qué hacer!». ¡Madre mía del amor hermoso!
Por cierto, le pedí una receta veraniega, me contó cómo se hacía un gazpacho de los de toda la vida y… ¡Me dio casi un curso completo de gastronomía!
Afirma que, si fuera funcionaria, «seguramente que también estaría mosqueada. Aunque a lo mejor también lo entendería». Y es de las que piensa que este país se ha cargado mucho de políticos y de funcionarios, en definitiva, «de muchos sueldos. Y la negación era una mentira y la realidad era que estábamos atravesando una gran crisis».
¿Barreda o Cospedal? «A él no le traté mucho, pero la gestión de su Gobierno dejó mucho que desear, sinceramente. Y Cospedal siempre me ha inspirado confianza y sé que va a ser capaz de sacarnos de esta crisis a base de muchos sacrificios, de sacrificios nuestros, claro».
Afirma que haría cualquier cosa para comer «menos prostituirme», que duerme siempre con pijama, sea de verano o invierno, «pero desarropada», y que a ella el tamaño…
¡Ay el tamaño! Eso es punto y aparte. ¿Le importará o no? Ja, ja, ja… Mañana lo podrán descubrir. Aunque ella… Puestas a… ¡Que no, que no… Mañana sabrán si el tamaño del miembro…!
Entre sus travesuras recuerda cuando le quitó un día el coche a su hermano y cuando fue a torcer la esquina por una calle de su pueblo… ¡Tracatrá! Se lo pueden imaginar, pero también les voy a dejar con la duda. Lo único que les adelanto es que el cabreo de su hermano fue poco menos que mayúsculo.
Y llegamos al quid de la cuestión: ¿Se atreve a decir el lugar más raro donde ha practicado sexo? «¡Joder, César, es que soy muy clásica…!». Ja, ja, ja… Pero aun así, aunque quiera parecer modosita, Blanca también lo ha hecho fuera de la cama. La cuestión es: ¿dónde?
¿Se lo imaginan? Pues tienen todo un día para hacerlo, porque la incógnita se la resolveremos mañana, cuando publiquemos, íntegra, la Entrevista Irreverente en encastillalamancha.es.
¡Olé!