El Gobierno de Castilla-La Mancha ha desactivado el Plan Específico ante el Riesgo por Fenómenos Meteorológicos Adversos (Meteocam), después de que se hayan registrado 693 incidencias desde su activación en fase de alerta el pasado jueves, por el paso de las borrascas Elsa y Fabien.

El Meteocam ha sido desactivado esta mañana ante la evolución positiva del tiempo que se desprende de las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y de que ha disminuido significativamente en el número de llamadas al servicio de emergencias 112 relacionado con los fenómenos meteorológicos de los últimos días, ha informado en una nota de prensa la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas.

Asimismo, ha indicado que desde que el plan fue activado ha habido en Castilla-La Mancha 693 incidencias ocasionadas por las lluvias y el viento.

Árboles y tendidos eléctricos caídos, inundaciones…

El fuerte viento ha provocado caídas de árboles, tendidos eléctricos y elementos de fachadas, mientras que las precipitaciones han generado acumulación y balsas de agua en diferentes localidades de la región debido a las lluvias, donde han sido necesarias labores de achique.

También se han visto afectadas algunas carreteras, por la aparición de obstáculos como ramas o corrimientos de tierra o por verse anegadas, como la carretera autonómica CM-3203 en Ayna (Albacete), en la Sierra del Segura, que tuvo que ser cortada durante algunas horas por el desbordamiento del río Mundo.

Las incidencias han hecho que haya aumentado significativamente el número de llamadas recibidas en el 112, que han sido casi 18.000 en los cuatros días en los que ha estado activado el Meteocam.

El día con más llamadas fue el sábado, cuando se recibieron 5.300, mientras que en diciembre del año pasado, el día con más llamadas registradas fue Nochebuena, con 4.059, no superándose durante el resto del mes las 4.000 llamadas.

Por provincias, destaca Toledo, donde se han registrado más de la mitad de los incidentes que se han producido en la región, 385 en total.

Aunque se ha visto afectada toda la región, la capital toledana y Talavera de la Reina han sido las localidades en las que más incidencias se han contabilizado, y también ha sido significativo el caso de Yeles, donde hubo que desalojar a algunas personas de sus viviendas en la urbanización Los Cisneros, debido a la crecida del arroyo Guatén, que regresaron en la mañana de ayer a sus domicilios.

Guadalajara ha sido la segunda provincia en número de incidentes, con un total de 119, mientras que en Cuenca se han registrado 84 incidentes, entre los que destaca la crecida del Júcar a su paso por la ciudad, que se desbordó en varios puntos del tramo urbano y obligó a cortar accesos en la ribera del río por los posibles problemas que pudiese ocasionar.

A su vez, las provincias de Ciudad Real y Albacete han sido las menos castigadas con 53 y 52 accidentes registrados, respectivamente.