La tromba de agua que cayó ayer tanto en La Alcarria guadalajareña como en la conquense fue brutal, como ocurrió en las localidades de Villaconejos de Trabaque y Sacedón. Precisamente en una localidad de Guadalajara vecina de Sacedón y ribereña de Entrepeñas Córcoles, se hundió un muro de un deteriorado edificio histórico.
Se trata de uno de los muros del Monasterio de Santa María de Monsalud, construido en el siglo XII por la Orden cisterciense. La Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía ha denunciado la caída de este muro de la «joya cisterciense de Guadalajara» en su cuenta de Twitter.
Además, piden «respuesta rápida de la administración» con este edificio histórico que estuvo en la Lista Roja del Patrimonio hasta 2008, cuando se acometió la consolidación parcial del monasterio y, aunque desde Hispania Nostra indican que todavía «no está totalmente consolidado y restaurado» lo sacaron de la lista por esta intervención y por «el interés para mantenerlo».