sábado, 18 de mayo de 2024
Para identificarlos a través del ADN 15/07/2012junio 13th, 2017

Fueron un total de 151 enterramientos en la localidad burgalesa de Valnoceda, donde hubo una prisión en la que las condiciones de vida, tal y como han expresado en su cuenta de Twitter los responsables de la Asociación de Familias de Presos Represaliados en Valdenoceda, «eran tan duras que, de hecho, fue una prisión de exterminio. Allí murieron muchos presos, fusilados, arrojados al río o a cuevas o, simplemente, de hambre».

¿Y por qué traemos a encastillalamancha.es esta historia de la Guerra Civil y sus consecuencias?


Pues muy sencillo. Porque de esos 151 enterramientos se han conseguido exhumar 112 cuerpos (39 no han podido ser rescatados aún dado que se encuentran en el cementerio viejo, justo debajo de los enterramientos nuevos que se realizan en la misma fosa desde 1989); y de esos 112 se han identificado 21 cuerpos, de los cuales 20 ya han sido entregados a sus familias.

Ahora lo que trata de conseguir la Asociación es localizar a las familias descendientes de los 92 presos restantes cuyos huesos ya han sido exhumados. Y de esos 92, he aquí la cuestión que nos ocupa, 39 eran naturales de Castilla-La Mancha, fundamentalmente de la provincia de Ciudad Real.

LOS 39 PRESOS DE CASTILLA-LA MANCHA: HE AQUÍ SUS NOMBRES, APELLIDOS Y PROCEDENCIA

39 presos castellanomanchegos de la prisión de Valnoceda y cuyos nombres y apellidos les facilitamos a continuación, ya que el objetivo de la Asociación es que los familiares sepan que los cuerpos ya han sido exhumados, «pero sin la localización de esas familias nunca será posible su identificación». Son estos:

De la provincia de Ciudad Real:

1. Juan José Alcázar Tejados, de Villahermosa (Ciudad Real).

2. Cándido Aranda Rimon, de Alcolea de Calatrava (Ciudad Real).

3. Pedro Arroyo Díaz, de (…) de Calatrava (Ciudad Real).

4. Antonio Bailón Cuadrado, de Manzanares (Ciudad Real).

5. Lorenzo Castillo Martín, de (¿Gargantiel?) (Ciudad Real).

6. Ángel Collado Moya, de Valdepeñas (Ciudad Real).

7. Antonio Contreras Porras, de Almagro (Ciudad Real).

8. Agustín Delgado Sánchez, de Socuéllamos (Ciudad Real).

9. José Estero Navarro, de Socuéllamos (Ciudad Real).

10. José Fernández Yut de Villar, de Puertollano (Ciudad Real).

11. Modesto Flores Jiménez, de Daimiel (Ciudad Real).

12. Ciriaco García Gómez, de Anchuras (Ciudad Real).

13. Eugenio García Quintana, de Valdepeñas (Ciudad Real).

14. Manuel Gavilán Osoria, de Argamasilla de Calatrava (Ciudad Real).

15. Julián González González, de Almagro (Ciudad Real).

16. Antonio López Mora, de San Lorenzo de Calatrava (Ciudad Real).

17. Andrés López Olmo, de Bolaños (Ciudad Real).

18. Rufino Madrigal Hovillo, de Tomelloso (Ciudad Real).

19. Antonio Moreno Almarecha, de La Solana (Ciudad Real).

20. Manuel Muñoz Arias, de Membrilla (Ciudad Real).

21. Bonifacio Olnuedo (¿Olmedo?) López, de Tomelloso (Ciudad Real).

22. Marcos Pardo Fernández, de Torralba de Calatrava (Ciudad Real).

23. Mamerto Redondo Muñoz, de Fuencaliente (Ciudad Real).

24. Marcelino Rodríguez del Prado, de Villamayor de Calatrava (Ciudad Real).

25. Andrés Romero Gallero, de (¿Ferinches?) (Ciudad Real).

26. Mariano Rosa Sánchez, de Puertollano (Ciudad Real).

27. Teodoro Sánchez Caro, de Picón (Ciudad Real).

28. Alejandro Sánchez Jara, de Villamayor de Calatrava (Ciudad Real).

29. Benigno Sánchez Moya, de San Lorenzo de Calatrava (Ciudad Real).

30. Nicasio Urbina Fernández, de Anchuras (Ciudad Real).

31. Valentín Villanueva García, de (¿Villanueva de Hoja?) (Ciudad Real).

De la provincia de Toledo:

32. Vicente Bellido Muñoz, de Alcaudete de la Jara (Toledo).

33. Celedonio Molina Alba, de La Nava de Ricomalillo (Toledo).

34. Crisanto Urdiales García, de Calzada de Oropesa (Toledo).

De la provincia de Guadalajara:

35. Antonio de Pedro Viejo, de Hita (Guadalajara).

36. Calixto Pérez Esteban, de Guadalajara.

De la provincia de Cuenca:

37. Abilio Luis Javea, de Vara del Rey (Cuenca).

De la provincia de Albacete:

38: Jesús Martínez Ruiz, de Albacete.

39. Eloy Sánchez Martínez, de Mesegoso (Albacete).

La propia Asociación explica que la lista «está recogida, literal, del Registro Civil de Quecedo (Burgos), por lo que puede haber errores.

«FALLECIERON POR COLITIS EPIDÉMICA, QUE NO ERA OTRA COSA QUE HAMBRE»

La labor de investigación la inició José María González junto a su sobrino Eneko y llegaron a la conclusión de que la práctica totalidad de los 151 presos «fallecieron por colitis epidémica, que no era otra cosa que hambre».

José María contó con la ayuda de un reducido número de personas a la hora de encontrar a las familias de las víctimas, además de buscar financiación para la exhumación. Sabían que los cuerpos se encontraban «en una parcela aledaña al antiguo cementerio parroquial que, al ser ampliado, la había hecho suya, de tal forma que los nuevos enterramientos del pueblo se realizaban allí desde 1989. Encima de los restos de los presos».

Localizar a las familias del listado que les hemos ofrecido posibilitaría «cotejar sus ADN con el ADN de los restos óseos. Por eso nos hemos propuesto, como una de las tareas más importantes, localizar a las familias».

«CAVABAN UNA FOSA DE MÁS DE UN METRO PARA PROTEGER LOS RESTOS DE LAS ALIMAÑAS»

Y aunque la Asociación afirma que «la historia de Valdenoceda es espeluznante», la forma «en la que eran enterrados los presos fallecidos demuestra que existía humanidad y solidaridad entre los propios presos».

A los reclusos «apenas les daban de comer y el frío y las condiciones higiénicas hacían el resto. Pero una vez que fallecían, los propios presos preparaban una caja, un ataud para el preso, y en él introducían sus pocas pertenencias. Hemos encontrado, relojes, amuletos, crucifijos…».

A partir de ese momento, «los presos trasladaban a sus compañeros muertos hasta la parcela aledaña al cementerio y allí cavaban una fosa de más de un metro de profundidad para proteger esos restos de las alimañas, ya que la parcela estaba al aire libre y sin protección. Después, creemos, identificaban cada enterramiento y colocaban una cruz en cada uno de ellos».

Pero, con el tiempo, «todos estos rastros se han perdido y la única manera de saber conseguir a quién corresponde cada resto es mediante técnicas de ADN, confrontando las muestras del fallecido con las de sus familiares descendientes».

¿Conoce a alguno de los 39 presos de Valnoceda que eran de Castilla-La Mancha?

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