El Comité de Empresa del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) en Toledo -formado por CCOO, UGT y el Sindicato de Circulación Ferroviaria (SCF)- ha pedido a Renfe que asuma las tareas comerciales y de atención al cliente en las estaciones de la línea de Talavera de la Reina.

En nota de prensa, el Comité de Empresa ha lamentado que además de los conocidos retrasos, averías, transbordos por carretera y cancelaciones de trenes, los usuarios de la línea de ferrocarril de Talavera están sufriendo también «una nueva afrenta por parte de las empresas Renfe y Adif».

Así, ha explicado que Renfe no ha asumido sus obligaciones comerciales (información, venta de billetes, servicio post-venta, reclamaciones y atención al cliente) y las ha dejado en manos de Adif, pero el administrador las realiza de manera «residual y secundaria», sin tener trabajadores que atiendan de manera específica al cliente ni las problemáticas que les puedan surgir.

«Adif no da la talla y Renfe pasa»

Para los sindicatos, «Adif no está a la altura de lo que los contribuyentes demandan» y han denunciado que la situación en el mes de agosto se ha vuelto «surrealista y kafkiana».

En este sentido, han informado de que toda la actividad de la estación de Talavera, y el resto de estaciones de esta línea, la realiza un solo trabajador de Adif, que sin embargo tiene como misión principal la de controlar la circulación de los trenes para que sea lo más puntual posible y para evitar que ocurran accidentes.

No obstante, según los sindicatos, la Jefatura de Adif, con sede en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), «presiona» al trabajador para que realice las funciones comerciales al mismo tiempo que controla la seguridad en la circulación de los trenes, promoviendo una distracción que «podría desembocar en un accidente de fatales e irreparables consecuencias», han alertado.

Sin embargo, para salvar su responsabilidad, Adif ha colocado en las estaciones un aviso a los viajeros en el que comunica un «ficticio horario» de información y venta, pero en letra pequeña recoge que esas tareas las realizará el trabajador cuando no tenga que atender sus funciones de control de los trenes.

Este aviso es, para los sindicatos, una «falta de respeto» al contribuyente porque no le garantiza que vaya a ser atendido en el horario fijado, y una falta de respeto también al trabajador que se ve obligado de manera continua a comunicar al viajero que en ese momento no le puede atender o tiene que dejar de atenderlo para realizar las funciones que Adif le ha marcado como prioritarias.

En concreto, CCOO, UGT y SCF han indicado que en Talavera el cartel puesto por Adif informa de que queda suspendida la venta de billetes para trayectos de largo recorrido, por lo que los viajeros que necesitan estos servicios han de encaminarse a la estación de Toledo por ser la más cercana, a 90 kilómetros de distancia.

«Adif no da la talla y Renfe pasa», han lamentado los sindicatos del Comité de Empresa.